Los gobiernos central y vasco pactan que Euskadi gestione los permisos de trabajo para inmigrantes

Con esta competencia se pretende agilizar la concesión de las autorizaciones de trabajo, que ahora mismo supone una auténtica carrera de obstáculos para los extranjeros. De hecho, el Gobierno vasco calcula que hay más de 20.000 inmigrantes 'sin papeles' en Euskadi en un momento en que las empresas tienen serias dificultades para cubrir vacantes por la crisis demográfica, especialmente grave en el País Vasco.

El acuerdo fue alcanzado en la reunión de la Comisión Mixta de Transferencias celebrada en Madrid y que estuvo presidida por el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, y la consejera de Gobernanza y Autogobierno, Maria Ubarretxena. Una cita que tenía como objetivo cerrar de forma definitiva los dos últimos traspasos pactados por Pedro Sánchez e Imanol Pradales a finales de noviembre: Gestión del Litoral y Actividades Cinematográficas y Audiovisuales. Son ya cinco materias acordadas entre ambas administraciones a lo largo de este 2024, después de que en marzo se firmase lo referido a Cercanías, acogida de inmigrantes y homologación de títulos extranjeros.

Con esta carpetas zanjadas, el ministro Torres anunció «un principio de acuerdo, que se va a materializar en las próximas semanas en una sexta transferencia» sobre «permisos de trabajo para personas inmigrantes». Y no es una cuestión menor, al menos en lo político, porque se trata de una materia en la que el Gobierno vasco lleva poniendo el foco en las últimas semanas.

El propio Pradales ha insistido en diferentes foros –en la reunión que mantuvo con Sánchez en la Moncloa en noviembre y en el Foro Expectativas de EL CORREO de la semana pasada– en la necesidad de dotar a Euskadi de «mayores competencias en materia de inserción sociolaboral» y tener «capacidades de gestión migratoria propias para poder desarrollar así una estrategia adecuada». De hecho, ha apuntado que hay más de 5.000 inmigrantes 'sin papeles' formándose en Lanbide, «que sin esa autorización acaban en la economía sumergida». El lehendakari reclama, incluso, una reforma de la Ley de Extranjería.

La cuestión migratoria también fue uno de los ejes sobre los que giró la Conferencia de Presidentes de la semana pasada, en la que Pradales y el presidente canario, Fernando Clavijo, formaron un frente común para exigir «responsabilidad» y «solidaridad» al resto de comunidades para un «reparto justo» de los menores no acompañados.

El contenido concreto del nuevo acuerdo se avanzará durante una reunión técnica a la que ambas administraciones se han emplazado el próximo 26 de diciembre. Pero, en principio, una vez se cierre este traspaso de forma definitiva, el Gobierno vasco podrá encargarse de conceder las autorizaciones iniciales de trabajo de personas extranjeras y gestionar su resolución.

Ubarretxena señaló que, tras este «acuerdo político», la previsión es que se puedan empezar a tramitar los primeros permisos de trabajo desde Euskadi el año que viene. La consejera puso en valor la «buena sintonía» que hay entre los dos gobiernos y valoró «positivamente» la reunión con el ministro Torres, tras agradecer a los equipos negociadores «el largo trabajo realizado en estos meses y la voluntad política existente».

En la Comisión Mixta de Transferencias de este lunes, el Gobierno central y el vasco han hecho efectivos los traspasos a Euskadi de las competencias de Ordenación y Gestión del Litoral y Cinematografía, después de que las cerrarán hace un mes tanto Sánchez y Pradales en la Comisión Bilateral de Cooperación Permanente. Ambas tienen una valoración de 4,3 y 1,9 millones, respectivamente, a deducir del Cupo.