Covite replica a San José que «es mentira» que la ley no exija el arrepentimiento

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Consuelo Ordóñez ha reclamado a la consejera que «deje de arrogarse hablar en nuestro nombre porque Covite nunca ha criticado que los presos de ETA salgan de la cárcel cuando cumplan sus condenas, lo que queremos es que las cumplan con arreglo a nuestras leyes y sentencias condenatorias». Según ha destacado, «denunciamos que se está vulnerando la ley y por consiguiente nuestro derecho a la justicia, concediendo terceros grados y 100.2 fraudulentos como churros, sin cumplir con el requisito legal del «arrepentimiento» que marca el artículo 90 del Código Penal».

Detallan, incluso, la formulación de ese artículo 90 donde se dice que «se entenderá que hay pronóstico de reinserción social cuando el penado muestre signos inequívocos de haber abandonado los fines y los medios de la actividad terrorista y además haya colaborado activamente con las autoridades, bien para impedir la producción de otros delitos por parte de la banda armada, organización o grupo terrorista, bien para atenuar los efectos de su delito, bien para la identificación, captura y procesamiento de responsables de delitos terroristas».

Asimismo, la norma apunta que «podrá acreditarse mediante una declaración expresa de repudio de sus actividades delictivas y de abandono de la violencia y una petición expresa de perdón a las víctimas de su delito, así como por los informes técnicos que acrediten que el preso está realmente desvinculado de la organización terrorista y del entorno y actividades de asociaciones y colectivos ilegales que la rodean y su colaboración con las autoridades». Este es uno de los aspectos a los que suele aludir Covite, mostrando las vinculaciones de los presos que progresan de grado con las organizaciones de la izquierda abertzale que los reivindican como «presos políticos».

La presidenta de Covite también ha reclamado «ejemplos con nombres y apellidos de presos de la banda que reconocen el «daño causado», algo que también han recordado que ya reconocía ETA «en el comunicado en el que reivindicó los atentados contra nuestros familiares». En su opinión, «si están vinculados a la izquierda abertzale y son exhibidos en sus actos públicos como héroes, es imposible que estén arrepentidos. Es un insulto a las víctimas pretender hacernos creer que han «evolucionado» porque lo dicen en unas cartas que nunca salen a la luz, mientras en público los siguen honrando única y exclusivamente por su pasado criminal».