Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
A. González Egaña
Lunes, 2 de diciembre 2024, 19:01
La Audiencia Nacional ha condenado a 30 años de cárcel cada uno a los exintegrantes de ETA Aitor Agirrebarrena, 'Peio', y Asier Arzalluz, 'Santi, por ... el asesinato de José Luis López de Lacalle, el 7 de mayo de 2000 junto al portal de su casa en Andoain. El fallo, al que ha tenido acceso este periódico, les impone la pena de prisión «como responsables en concepto de autores, de un delito de terrorismo con causación dolosa de muerte» y «con la concurrencia agravante de responsabilidad criminal de alevosía». Deberán indemnizar a los familiares de De Lacalle con 300.506 euros, según recoge el escrito.
Durante el juicio celebrado el pasado 12 de noviembre, ambos acusados reconocieron su participación en el atentado. Sin embargo, la Audiencia Nacional cita en la sentencia que «dicho reconocimiento no ha venido acompañado de ningún signo de arrepentimiento o de disculpa para las víctimas del asesinato, y se ha realizado 22 años después de la comisión de los hechos, por lo que el mismo no puede servir para valorar la imposición de una pena inferior a la máxima contemplada por la legislación vigente».
Por este crimen fueron condenados Ignacio Guridi Lasa, como autor material, y Xabier García Gaztelu, 'Txapote', por organizar y ordenar el asesinato de López de Lacalle, que murió al recibir varios disparos en plena calle cuando volvía a su casa tras comprar la prensa en un quiosco cercano.
La acusación contra Arzalluz y Agirrebarrena se amplió a raíz de una serie de hallazgos documentales e indagaciones posteriores que llevaron a concluir a Policía y Guardia Civil que eran los otros dos miembros del comando Totto, el que atentó contra López de Lacalle, que faltaban por identificar. Los agentes analizaron la documentación encontrada en 2002 en una casa de Castres (Francia) donde había un almacén de material logístico de ETA. Según los autos, se localizaron manuscritos en euskera, las llamadas 'kantadas', que «ponen de manifiesto la posible existencia de indicios racionales de criminalidad« contra ambos.
De acuerdo con el relato judicial, «Txapote», como «máximo responsable del aparato militar» de ETA, captó a Guridi Lasa en 1999 encargándole que formara «un comando legal armado». A su vez, este último contactó con «Santi» y «Peio». El fallo señala que Guridi Lasa, «Santi» y «Peio' le vigilaron durante una semana a fin de establecer un patrón de entradas y salidas que ese 7 de mayo no se cumplió. Esperaban que saliera de casa a las 9.30 horas como habían observado durante el tiempo que duró la vigilancia. El fallo señala que «después de haber intentado matarlo en varias ocasiones sin haberlo conseguido», ese día en vez de salir de casa se dirigía a su domicilio y Guridi Lasa se acercó para comprobar que era López de Lacalle y le disparó cuatro tiros, mientras que Arzalluz vigilaba, emprendiendo ambos la huida en dirección al ambulatorio de Andoain donde esperaba Agirrrebarrena en el interior de un vehículo».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Un anciano tira por la ventana 1.800 euros en Aranda
BURGOSconecta
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.