Vacaciones en familia a la vuelta de la esquina

Los clásicos siempre funcionan. Por mucho que cambien las épocas, los niños siguen siendo niños y disfrutan con los juegos que hicieron reír a sus madres y padres, a sus abuelas y abuelos... Como las atracciones de feria con las que cuenta el Parque Infantil de Navidad instalado en el BEC. Desde el barco pirata hasta Bob Esponja Wipe Out (sea lo que sea eso), pasando por King Kong Péndulo o Jungla Aventura. Además, el espacio Steam propone talleres para aprender ciencia y tecnología. Y hay espectáculos, gincanas y actividades deportivas… En fin, que los puntos suspensivos indican un no parar al menos hasta el 5 de enero, salvo el 25 de diciembre y 1 de enero. Todo el mundo tiene derecho a un descanso esos días.

Algo tan habitual como crecer con ovejas y otros animales de granja se ha convertido en las últimas décadas en una 'rara avis'. Pero, quienes no residan en un entorno idílico rodeado de animales, pueden pasar un rato en un lugar así. Es Alluitz Natura, en Abadiño, donde los visitantes se convierten en pastores por un día. La experiencia arranca sobre las diez de la mañana y se prolonga durante cuatro horas, en las que las familias pueden conocer a las ovejas, los perros, los ponies y demás animales del caserío. «Está centrado sobre todo en aprender acerca de la oveja latxa y el queso Idiazabal», aseguran los propietarios de las instalaciones, en pleno parque natural de Urkiola.

A lo largo de la mañana es posible dar de comer al ganado ovino y el biberón a los corderos, ordeñar a las ovejas, hacer cuajadas y queso fresco y degustarlos, preparar talos con chocolate para almorzar... una experiencia que ofrecen los sábados y domingos durante todo el año, pero que ahora en estas fechas también abren a otros días de la semana.

Disfrutar de maquetas ferroviarias y ayudar a las familias de niños con cáncer ingresados en el hospital de Cruces. Es lo que ofrece, desde ayer y hasta el domingo, el espacio YIMBY, en el número 3 la calle Doctor Achúcarro de Bilbao. La exposición que organiza cada año la asociación Agrunorte de módulos en escala N dispondrá de 48 metros de vía y tendrá una temática ferroviaria diferente cada día.

Trenes de vapor, de pasajeros, mercancías y alta velocidad circularán ininterrumpidamente por paisajes y recorridos realizados con todo lujo de detalle en un espacio en el que también se podrá contemplar una colección de objetos históricos relacionados con el ferrocarril. Los adultos deberán hacer un donativo de 2 euros, que serán entregados íntegramente al programa de apoyo y acogida de familiares y cuidadores de niños con cáncer hospitalizados en Cruces. La muestra permanecerá abierta de 10.00 a 14.00 horas y entre las 17.00 y las 20.00.

Artium Museoa abre sus puertas de par en par estos días para los niños. Además de instalar una zona de lectura infantil de acceso libre, este espacio cultural de Vitoria organiza una serie de talleres para que a los menores de entre 3 y 12 años se les hagan más amenos los días de vacaciones. Partimos de que este es un reportaje de planes en familia, pero por si acaso no está de más recordar que, en estas actividades, los niños deben estar acompañados de una persona adulta.

En Artium apuestan este año por centrar las manualidades en los deseos para el 2025. Y en eso trabajarán quienes se acerquen allí en los próximos días. A partir de la confección de formas geométricas en papel de seda de infinidad de colores, los menores darán forma a sus deseos para el próximo año, bien en forma de postal o sobre un gran mural compartido. El domingo y entre el 2 y el 4 de enero el taller estará abierto de 11.30 a 13.30 horas y de 17.30 a 19.30, mientras que el 31 de diciembre y el 5 de enero, solo en horario de mañana. La entrada es libre y no es necesaria reserva previa.

Y como no todo va a ser aprender, aunque sea de manera lúdica, también toca simple y llanamente jugar. Eso puede hacerse en casa, en esos días de lluvia, pero también en el frontón bilbaíno de La Esperanza. Este lugar, abierto al público a comienzos de año, es desde entonces, además de una instalación deportiva, la sede del Consejo Municipal de la Infancia y la Adolescencia, formado por menores, y un espacio de actividades infantiles. Pero estas navidades la gran fiesta llegará de la mano de Cruz Roja, que celebra esta tarde a partir de las cinco el Día del Juego.

La iniciativa se enmarca en la campaña 'Sus derechos en juego', impulsada desde hace años por la organización para conseguir juguetes para más de 1.500 menores de familias vulnerables. ¿Y que habrá en La Esperanza? Pues diversión, que es lo que más gusta a los niños -y a los no tan niños-. Tendrán talleres para crear sus propios juguetes con materiales reciclados, legos, disfraces, pintacaras, juegos tradicionales, photocall y rifas con sorpresas para pasar un buen rato.

De padres gatos, hijos michinos. Pero no todo es genética, y también hay que esforzarse un poco. Así que aquellos amantes del rock tienen la oportunidad de introducir a sus hijos en su pasión musical en un concierto adaptado para ellos. En el marco de los espectáculos infantiles Rock en Familia, mañana llega a Vitoria, al pabellón polideportivo Mendizorrotza, 'Christmas Rock Party', una propuesta con la que enganchar a la música a niños a partir de 3 años.

La banda interpretará durante dos horas (de 18.30 a 20.30) las canciones más emblemáticas de grupos internacionales como AC/DC, Bon Jovi, Ramones, Queen y también de otras más cercanas como Extremoduro, Barricada, Fito y Fitipaldis y Marea. «¡Un viaje musical que abarca lo mejor del rock!», aseguran sus impulsores.

El solsticio es el momento en el que el sol está en lo más alto y la diferencia entre la noche y el día es mayor, un momento de cambio que da nombre a 'Solstizium. Family Experience Room', montaje de acceso gratuito que estará hasta el 19 de enero en la Sala BBK, reconfigurada para acoger varias estancias que forman parte de un recorrido que arrancará con la entrega de unos amuletos. Un bosque donde la niebla y los sonidos de la naturaleza envuelven a los visitantes, animales que brillan en la oscuridad, un árbol al que susurrar mensajes, pozos en los que fundirse con personajes de la mitología vasca...

En definitiva, un viaje que termina en una laguna de los deseos en la que depositar el amuleto y pedir buenas nuevas para el siguiente año. La experiencia, en palabras de sus impulsores, será «inolvidable» tanto para los más pequeños como para los adultos, y ofrecerá sesiones cada media hora entre las 10.00 y las 20.00 horas. Las invitaciones -tuvieron que sacar 3.000 más al agotarse las primeras 15.000- pueden adquirirse en la página web de la sala.

¿Imaginan conocer a Marie Curie, Leonardo Da Vinci o Isaac Newton? Estos personajes, y otros de la misma talla, invitan a adentrarse de manera lúdica en los hitos científicos más importantes de la Historia. A través de la exposición 'Plastihistoria de la ciencia', Rialia Museo de la Industria (Portugalete) ofrece hasta el 16 de febrero una aproximación a inventores clave en los últimos siglos con una veintena de dioramas elaborados en plastilina.

La exposición arranca en la Prehistoria, con el descubrimiento del fuego, aunque permitirá también acercarse a las matemáticas con Pitágoras, la imprenta de Gutenberg, el 'Eureka!' De Arquímedes, la invención de la pólvora o el submarino... Un repaso a hechos que han cambiado la historia y que irá acompañado de un programa didáctico, con visitas guiadas, talleres infantiles, txoko didáctico para disfrutar con pasatiempos como crucigramas, sopas de letras, laberintos...

Si el tiempo lo permite, que en unas vacaciones tan largas seguro que sí, acercarse a la naturaleza es una de las mejores opciones. No hace falta irse muy lejos para disfrutar de agradables parajes. La subida a Saibigain, un monte cargado de historia, es una propuesta de 4,6 kilómetros apta para niños. Desde el parking situado en la trasera del restaurante Bizkarra, en Urkiola, se accede a la PR-BI 80, una pista con un suave ascenso y en la que, en la primera bifurcación, hay que tomar el camino de la derecha hasta llegar a un collado en el que comienza una subida hasta llegar a la Cruz.

Viajar de Castro Urdiales a Laponia y Oriente en unos 25 minutos. Parece una locura, pero es posible gracias al Ascensor Mágico de la Navidad abierto en la localidad cántabra. Esta atracción, en el parque de Amestoy, empieza el itinerario a 120 metros de altura, con unas bonitas vistas del municipio costero. La ilusión mágica que crea este elevador lleva a sus usuarios a un multiverso de fantasía que atraviesa las nubes y que, siguiendo el rastro de la estrella de Belén, les hace sobrevolar la casa de Papá Noel en el Polo Norte, cruzar el espacio sideral y recalar en el Palacio de Oriente, donde espera el Rey Mago Baltasar, al que los más pequeños podrán entregar sus cartas.

La experiencia continúa en el descenso, para revivir el viaje a través de cada paisaje y regresar, así, a Castro. Este peculiar transporte a la imaginación estará abierto hasta el 4 de enero entre las diez de la mañana y las ocho de la tarde.

Los amantes de los talos que no se acercaran a Santo Tomás el pasado sábado tienen una nueva oportunidad para degustar el rico pan de maíz. Eso sí, deberán preparárselo ellos en el Txakoligunea de Bakio, que abrirá sus instalaciones el domingo para que los niños (a partir de 4 años) y sus progenitores se pongan manos a la masa. Los menos avezados con la cocina que no se preocupen, que la actividad estará dirigida por Aitor Aurrekoetxea, todo un experto en la producción de chacinería y talo. La cita será de 11.30 a 13.00 horas y es necesario reservar.

Y con la tripa llena, también se puede sacar un rato para disfrutar del arte. El Museo Guggenheim está haciendo más amenas las visitas familiares con un juego que puede encontrarse en las taquillas y que plantea a los niños actividades creativas. Una propuesta con la que se pretende que los más pequeños exploren los vínculos entre el agua, el arte y la Navidad.

En algunas ciudades ya hay más perros que niños. Con ese dato queda claro que los menores saben de sobra reconocer a los canes. ¿Pero, salvo la niña de la caperuza roja, alguno ha visto un lobo cara a cara? ¿Y un erizo, un bisonte, un gamo o un muflón? Conocer esos animales, y muchos otros, es lo que ofrece el refugio de la fauna Basondo, en Kortzeubi, que permite disfrutar y aprender curiosidades sobre diferentes especies a lo largo de un itinerario circular y asfaltado en su mayor parte.

Casi en la otra punta de Bizkaia, en una finca centenaria de 20 hectáreas, encontramos otra opción para los amantes de los animales en BBK Karpin Fauna. En el refugio de Carranza habitan más de medio centenar de especies diferentes que, «a causa de actos irresponsables del ser humano, ya no pueden vivir en libertad», aseguran desde el parque. El oso 'Bruno', el macaco 'Anselmo' y el leopardo 'Mahoni' son algunos de sus moradores.

Además, es posible adentrarse en el valle de los dinosaurios y en una zona de bosque cerrado para saber más acerca de los animales que poblaron el planeta tras la colisión del meteorito. En ambos casos puede contratarse la visita guiada.