Las primeras carabelas portuguesas de este año aparecen en las playas de Bizkaia
Las autoridades avisan de la presencia de estas peligrosas medusas en la playa de Bakio
Durante los últimos veranos, la carabela portuguesa se ha convertido en una presencia cada vez más habitual en la costa vasca. Este jueves, la Diputación ... Foral de Bizkaia ha alertado de la detección de varios ejemplares en el arenal de Bakio, donde ha ondeado la bandera roja durante toda la jornada. También se han avistado medusas de esta especie en los arenales de Laga y La Arena a lo largo de la tarde. En principio, se han producido dos picaduras de carácter leve en Bakio. El proceso a seguir cuando se detecta uno de estos ejemplares es avisar de su presencia por megafonía y alertar al Departamento de Salud del Gobierno vasco.
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El fenómeno no es exclusivo de Bizkaia. Hace solo unos días, se registraron los primeros avistamientos en las costas de Galicia y Asturias, y ahora estas peligrosas criaturas han alcanzado también Euskadi. En San Sebastián, el Ayuntamiento ha difundido este jueves por la tarde una imagen tomada en la playa de la Zurriola. Los servicios municipales alertaban a los bañistas de su presencia y pedían extremar las precauciones en Gros.
Los precedentes preocupan. El pasado verano, solo en julio, se registraron 25 incidentes de este tipo en el litoral de Bizkaia, donde la carabela portuguesa hizo su aparición también a principios de mes. Desde 2008, su presencia en el Cantábrico se ha vuelto recurrente, y el aumento de la temperatura del mar parece estar favoreciendo su llegada en los meses estivales.
¿Qué hacer si te pica una carabela portuguesa?
Los expertos coinciden en que un encuentro con esta medusa puede resultar muy doloroso. Si se sufre una picadura, lo más importante es mantener la calma, salir del agua y acudir al personal de socorrismo para que evalúe la herida. No se debe frotar la zona afectada, ya que esto podría extender el veneno. Es importante retirar con cuidado los tentáculos que hayan quedado adheridos a la piel, utilizando pinzas, guantes o incluso una prenda de vestir.
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Después, conviene aplicar compresas frías para calmar la quemazón. La zona debe limpiarse siempre con agua salada, nunca dulce, y para neutralizar el veneno se recomienda aplicar vinagre o alcohol. A lo largo de los días siguientes, una crema específica de venta en farmacias o una espuma de hidrocortisona al 1 % puede ayudar a aliviar los síntomas. En algunos casos, especialmente si la reacción es fuerte, pueden aparecer fiebre o vómitos, por lo que no hay que descartar la atención médica.
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