El monte coronado por una virgen histórica

El Txarlazo es uno de los montes más emblemáticos de Bizkaia. Está coronado por una imponente Virgen de La Antigua visible desde 42 municipios y que bendice los montes y las praderas que otea desde su privilegiada atalaya. La gigantesca estatua -mide 25 metros y está fabricada con 50 toneladas de cemento Portland belga y un armazón de 20 toneladas de hierro- ya tiene más de 120 años y está ahora vallada porque las ventiscas y las heladas hacen mella en su estructura. Es muy venerada por los vecinos, que tienen por costumbre procesionar a la cima y organizar una romería a sus pies.

Es preferible realizar esta preciosa marcha un día soleado, sin niebla, para disfrutar debidamente de los paisajes. Optamos por un recorrido de poco más de 10 kilómetros que parte desde el santuario de La Antigua, en cuyas inmediaciones se aparca sin dificultad y donde se venera a la patrona de Orduña cada 8 de mayo. Ascendemos primero por la ruta clásica pero pronto nos desviamos a la izquierda para tomar rumbo al Pico del Fraile. La subida presenta cierta dificultad. El camino es empinado, estrecho pero perfectamente marcado y va ascendiendo a través del collado por una senda que después se convierte en aérea. Con vistas que quitan el hipo.

Nos vamos acercando a la pared rocosa y asoma el espectacular pináculo, una de las vías clásicas de escalada en Euskadi. Atravesamos el portillo y se asciende hasta la altura de la mole rocosa por una fuerte pendiente. Una vez arriba, el camino se convierte en un agradable sendero que discurre en paralelo al acantilado y después por un hayedo hasta el Txarlazo, al que no hay pérdida y del que nos separa un último repecho exigente. Allí aguarda una gratificante panorámica del valle.

Disfrutamos del hamaiketako bajo la Virgen, al borde del precipicio, antes de emprender el regreso por el camino clásico. Nos adentramos por un bonito desfiladero entre rocas y luego la pista va descendiendo zigzagueante a través de un hayedo. Antes de alcanzar el santurio se pueden admirar plantas como boneteros. La excursión termina de la mejor manera, con una hora de relax en el Balneario de Orduña para quedarse como nuevo.

Temas

• Orduña
• Bizkaia