Al Atomium de Bruselas entre ermitas y hayas
Santa Isabel de Gipuzuri y San Bitor guían los pasos por una boscosa ruta circular que ensambla caracoles gigantes, dos cimas gemelas sobre la Llanada Alavesa y un curioso buzón
Hacia Itxogana e Indiagana se cruzan tantos caminos que puedes acabar en Bruselas. A estas dos cimas gemelas de los Montes de Vitoria se puede subir por múltiples itinerarios: desde Azáceta –puerto y pueblo–, desde Gauna, desde Erentxun... Igual que cada maestrillo tiene su librillo, cada mendizale tiene su ruta. La que nos ocupa parte de Ullibarri Jáuregui, en la Llanada Alavesa. Desde la subestación de Rotalde, por donde pasaba el 'trenico' Vasco-Navarro.
Al monte
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Distancia: 12 kms
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Altitud máxima: 1.098 metros
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Punto de salida: Ullibarri Jáuregui
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Dificultad: Media
Allí, un poste del GR-25 nos indica qué dirección tomar, hacia Santa Isabel, dejando a la izquierda la balsa por una cómoda parcelaria que abandonaremos a la derecha poco antes de toparnos con la Ermita Santa Isabel de Gipuzuri (siglo XIII), que atisbaremos entre los árboles. Hayedo, quejigal y un sendero estrecho pero bien marcado que, ganando altura poco a poco, nos conduce hasta el bosque. Atención en esa zona a los cairns y a algunos puntos rojos en árboles que nos marcarán el rumbo hasta la Fuente del Mandio, no sin antes asombrarnos ante un singular ejemplar de haya de tan colosales proporciones que requiere de varias personas para darle un abrazo.
Unos 300 metros más adelante, superando el cruce con el camino que viene de Gauna, llegaremos a la Ermita de San Vitor, de gran tradición para los alaveses. Zona de recreo y esparcimiento familiar –con mesas y parrillas–, donde conviven enormes caracoles y setas, aunque es recomendable no hincarles el diente, ya que son de madera. Cruzando las campas hacia el Sur, buscamos el sendero hacia Itxogana (1.063 metros), coronado por una cruz de hierro y sus espléndidas vistas sobre la Llanada.
Puedes volver por donde has venido, pero es recomendable hacerlo por una ruta circular que por el collado de Elabe atraviesa el camino que une Azáceta y Santa Isabel –por donde podremos regresar después–, hasta llegar, siguiendo los guiños de los montones de piedras, a la cima de Indiagana (1.098). Allí, semioculto entre hayas –ésta es sin vistas–, te espera un curioso buzón en forma del Atomium de Bruselas en miniatura.
