Las tradiciones sostienen a las sociedades y en el País Vasco teníamos una inamovible por el lado universitario. Consistía en que, llegada la apertura del ... nuevo curso, el rector o rectora de la UPV o EHU le recordaba en su discurso al lehendakari lo de la financiación. A continuación, lo que hacía el lehendakari era recordarle a los vascos y las vascas el esfuerzo presupuestario que su Gobierno ya hacía por la UPV y la EHU y el papel decisivo, fundamental, que la universidad, etc. La llegada de Joxerramon Bengoetxea al rectorado de la UPV/EHU ha alterado esta tradición, que imagino milenaria como todas las nuestras. En la apertura del curso, el nuevo rector habló sobre todo de Palestina. Y no fue hasta hace unos días cuando pareció centrarse en las cuentas, lo que desembocó en una comparecencia urgente para anunciar que el incremento presupuestario anunciado por el Gobierno vasco no es real y condena la universidad a la parálisis y al colapso. Resumiendo: hace falta más del doble de financiación.
Publicidad
Tras el órdago presupuestario, se esperaba la respuesta del Gobierno vasco por ver cómo se nos queda el 'pas de deux' y resulta que también hay novedades. El nuevo consejero de Ciencia y Universidades fue rector antes que consejero y mantiene un blog en el que realiza un ejercicio anómalo en nuestra vida política, consistente en utilizar las palabras con precisión para transmitir y relacionar ideas de un modo personal y lógico. Ha sido así como Juan Ignacio Pérez Iglesias cuestionó el «lenguaje hiperbólico» de Bengoetxea con argumentos que ayer repitió en el Parlamento. Lo hizo para negar de un modo tajante ante los grupos políticos la infrafinanciación de la EHU.
Que la reacción del rector haya sido exigir respeto institucional y pedir una reunión urgente con el lehendakari nos sitúa ante un choque francamente llamativo entre la universidad pública y el Gobierno vasco. Su cariz político parece evidente. Aunque el consejero Iglesias haya llegado a desear que no se utilice a la universidad como ariete. Es un deseo retórico, otra novedad. Estamos hablando de la Universidad del País Vasco. Y en este país se ha visto hacer oposición, pero oposición en serio, incluso con un consorcio provincial de transportes.
-
Fuga o suicidio
Sabemos que los mejores pleitos son lo que no se tienen. Los segundos mejores deben de ser los que no se siguen en directo. El juicio al fiscal general en el Supremo no es uno de ellos. Dos sesiones y sus efectos son ya desoladores. Comenzó el lunes con las ovaciones de los fiscales a su jefe jerárquico, que parecieron a punto de darse también dentro de la sala. Y siguió ayer con Miguel Ángel Rodríguez desplegando en el Supremo mañas de plató y con la pareja de Ayuso marcándose un alegato en el que aseguró que a él, tras la filtración de sus problemillas fiscales, solo le queda el suicidio o la huida de España. «No le recomiendo ninguna de las dos cosas», le respondió el presidente del tribunal con evidente sabiduría. Tampoco es fácil el trabajo de ese tribunal. De la orientación de su fallo dependerá que nos encontremos ante la apoteosis del 'lawfare' impulsado por los poderes ocultos o ante la irrupción en el cielo de Madrid de la mismísima diosa Temis para señalar con su dedo sagrado la inocencia del más inocente de entre los hombres. Se trata de alguien a quien, según lo escuchado el lunes, se le acusa en sus narices de cometer un delito en el ejercicio de su alta responsabilidad y responde: «Eso ahora no importa».
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión