Borrar
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz. El Correo
Laboratorio de riesgo

Laboratorio de riesgo

braulio gómez

Jueves, 13 de septiembre 2018, 01:32

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La Diada vuelve a reforzar el foco que apunta a Cataluña como el escenario que marca la agenda política española y también la vasca. La libertad de los líderes independentistas encarcelados, que ya apoya hasta el ministro Josep Borrell, se está convirtiendo en una demanda mayoritaria que traspasa ampliamente el mundo independentista y que la democracia española tendrá que resolver para que se pueda abrir de verdad un nuevo tiempo político en Cataluña. Para entender mejor los desafíos y escenarios que se pueden generar en los próximos años en la política española, quizás pueda resultar más útil empezar a registrar todo lo que se mueve y se va a mover en Andalucía alrededor de la inminente cita electoral.

Las elecciones andaluzas serán el campo de experimentación donde los cuatro partidos estatales podrán demostrar en qué consiste esta nueva era post-Rajoy. La fortaleza del socialismo andaluz es clave para el proyecto de Pedro Sánchez y actualmente los vientos favorecen los intereses del Gobierno de Susana Díaz. Fundamentalmente los vientos inéditos que trae la competición política entre dos partidos de derechas para hacerse con la supremacía electoral dentro de su bloque. El laboratorio andaluz va a servir para testar qué efecto tiene en la campaña electoral esta nueva competición que nos puede acercar peligrosamente a la normalización de la agenda pública que la ultraderecha ha institucionalizado en Europa y que está en continuo crecimiento, como hemos visto en Suecia. Ciudadanos, sonado en el medio del ring tirando de los lazos amarillos para no caerse desde la ascensión de Sánchez al poder, sueña con recobrar la iniciativa en el primer combate que se va a producir en España entre dos partidos de derechas por el mismo espacio. Pablo Casado tampoco va a perder la oportunidad de contaminar la arena electoral andaluza con sus intereses a nivel estatal para consolidar su liderazgo. La inmigración, la seguridad y el orden pueden aparecer como temas destacados de la campaña, como está pasando en la mayoría de los países de Europa. Y en estos países también hemos podido comprobar que no es necesario que existan estos problemas para que cale el discurso del miedo.

La anunciada presencia de Inés Arrimadas en Andalucía hace pensar que se usará a Cataluña como elemento de confrontación. Y si vemos la estrategia seguida por Ciudadanos y el PP contra el Gobierno de Sánchez, no parece que vayan a renunciar a utilizar su relato de la llegada de los socialistas al poder a través de una traición al interés general, incluido el de los andaluces, en beneficio de los nacionalistas separatistas, incluidos en el saco EH Bildu y el PNV. Se traerán a la confrontación todos los agravios inventados que sufren los andaluces por culpa del egoísmo de los nacionalismos periféricos y C's amplificará su discurso contra el Cupo vasco. Y no está claro que el PP andaluz quiera quedar como más flojo en esta dimensión.

La elaboración del nuevo Estatuto vasco y el encaje en el Estado español puede verse afectada por la actitud que tome el Partido Socialista andaluz para responder a los partidos de la derecha. Si se enrolla en su tradicional bandera andaluza que no consiente un tratamiento diferenciado para Euskadi y Cataluña pondrá en aprietos a sus compañeros vascos, a los que nunca ha tratado con mucho respeto. Si aprovecha la radicalización tanto de Ciudadanos como del PP en este eje, podrá contribuir a la colocación de la primera piedra de ese modelo plurinacional asimétrico que prometió tibiamente Pedro Sánchez y que no termina de arrancar. En este campo, la cooperación virtuosa con Unidos Podemos podría ayudar a emitir una señal de esperanza de que se puede abandonar el marco territorial sin salida que plantea la derecha al igual que se puede salir del marco del miedo que impregna la mayoría de los países europeos y que amenaza con llegar en otoño al territorio andaluz.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios