Tres años como falso policía

El caso del falso policía que 'se coló' en el Ayuntamiento vizcaíno de Etxebarri y que, pese a ello, ejerció las funciones propias de la ... Policía Municipal hasta que se destapó su engaño supone un aviso, aunque haya quedado archivado. Una advertencia para muchos consistorios urgidos a ampliar sus plantillas de seguridad. La decisión de un juzgado de zanjar el asunto como un delito leve, y ya prescrito, no evita llamar la atención sobre la necesidad de reforzar los controles para asegurar la legalidad de selecciones similares. Los ayuntamientos tienen dos opciones para contratar interinos: las bolsas conjuntas de Arkaute o sus ofertas de empleo. El guardia investigado falsificó el diploma de la academia y su currículum para superar la convocatoria del puesto, desempeñado durante más de tres años. Tiempo en el que patrulló las calles con el arma reglamentaria al cinto, detuvo a personas o puso multas. Los alcaldes de Etxebarri y mandos del servicio que fueron imputados inicialmente pueden respirar aliviados con la resolución, tras poner las irregularidades en manos de la Fiscalía. Pero sobre todo pueden hacerlo porque el agente impostor no aprovechó el aparente descontrol para dar otros sobresaltos.

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