Entre Erdogan y la apertura
Las elecciones a la presidencia de Turquía mostraron un país partido en dos. Entre el poder acumulado por Recep Tayyip Erdogan desde 2014 y el ... anhelo por un futuro más abierto. La primera vuelta y su 49,4% situaron al presidente al borde de asegurar su continuidad, frente al 45% cosechado por el candidato aglutinante del centro-izquierda, Kemal Kiliçdaroglu. El día 28, una parte de la sociedad turca continuará aferrándose al derecho al voto para acabar con la deriva autocrática. Otra parte optará por mantener las cosas como están. Es más que una disyuntiva doméstica porque la ubicación geográfica convierte al país en clave para la estabilidad de una amplísima zona del mundo. Una de las señales más preocupantes del escrutinio del domingo es que los votantes que migraron a Alemania o Francia respaldaron a Erdogan. La vivencia en sociedades liberales parece añorar una identidad que el líder islamista habría logrado simular en una mezcla de tradición y arbitrariedad, mientras sus compatriotas de Ankara y Estambul circulan en sentido opuesto. Será difícil que el conservadurismo del aspirante a la reelección acabe vencido por el aperturismo de su principal adversario.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión