Simón Moreno se sometió a una segunda operación esta semana

Mañana precisamente se cumple un año desde que el delantero de Cartaya cayera lesionado en el estadio José Zorrilla ante el Valladolid. Los peores presagios se confirmaban días después: sufría la tan temida rotura del ligamento cruzado de la rodilla izquierda, en un momento en el que se encontraba en su mejor estado de forma desde que recaló en el Mirandés. La lesión, sin embargo, le sigue dando problemas porque doce meses después continúa sin ver la luz al final del túnel. Hasta tal punto que ha vuelto a ser intervenido quirúrgicamente esta semana tras haber sido objeto de atención hospitalaria en noviembre pero de 2021.

Cabe recordar que hace tres años, en 2019, y también en noviembre, como si se tratara de un mes maldito para el futbolista, ya sufrió idéntica lesión en la otra rodilla. De momento, seguirá siendo baja de larga duración a la espera de comprobar cómo evoluciona de su dolencia.

«Hay que esperar, no va del todo bien. Le han explorado otra vez a ver cómo iba esa rodilla. Es difícil tener una lesión tan larga y complicada, no terminas de ver la luz y detalles como el de César el otro día al menos le pudo sacar una sonrisa. A ver si entre todos podemos ayudarle y, sobre todo, que vaya esa rodilla mejor para que dentro de no mucho se vuelva a sentir futbolista, que es lo que le está pasando a César ahora», contestó Etxeberria.

A la ausencia ya conocida de Simón Moreno, hay que añadir para este fin de semana las de Raúl García, Michelis y Raúl Parra. Falta hoy el último entrenamiento, pero esas son seguras. Queda conocer los resultados de las pruebas y que el club haga públicos los diagnósticos mediante los correspondientes partes médicos. «Esperemos que no sean malos aun sabiendo que hay lesión», deseó el entrenador.

«Vamos recuperando a gente. Ya está en plenitud Santos y César (Gelabert) ya ha reaparecido», apuntó. El '10' mirandesista lo hizo con nota el pasado miércoles.

Pendientes de conocer qué dictamina la resonancia a la que fue objeto el jueves el delantero. Apunta a sufrir una microrrotura fibrilar en los isquiotibiales.

Se sometió ayer a una resonancia magnética para tratar de esclarecer la dolencia que padece en la rodilla izquierda. Aún se desconoce el resultado. Al menos no se ha hecho público desde la entidad. Ya se dijo que no tenía buena pinta.

Es otro de los inquilinos que se mantiene en la enfermería. Su contratiempo está localizado en el ligamento interno de un tobillo. «Hay veces que va bien y otras que da más guerra. Está haciendo cada vez más cosas, aunque al principio sí que parecía que iba a ir bien. Tuvo que parar después y no puedo adelantar fechas sobre cuándo podemos contar con él, pero cuanto antes se recupere mejor, especialmente ahora que jugamos con tres centrales. «Va bastante bien y esperamos que pronto vuelva porque es un central de garantías», añaden desde el cuerpo técnico.