El Mirandés lleva gastados más de 910.000 euros desde 2013 en habilitar el fondo visitante

Tal es así que en los últimos 13 años, que es desde cuando se volvieron a instalar –previo pago al propietario– estos graderíos después de retirar el anterior que se había colocado también de forma provisional, el desembolso del club ha sido superior a los 910.000 euros. Sólo por los conceptos de renta y alquiler, a los que habría que sumar el vallado y otros trabajos complementarios.

Se distribuye en casi 70.000 euros al año en los últimos 13 ejercicios. Desde la entidad rojilla se abona una cantidad anual por el alquiler de las gradas de casi 45.000 euros, cuantía a la que se añade otra de 25.000 euros por año al dueño de esos terrenos por el hecho de ocupar ese espacio, un importe que provoca que no haya movimiento alguno por parte de quien lo recibe.

Y así cada año. La historia se repite. Sin embargo, se considera que esta acción debería tener fecha de caducidad porque se trata de un montante importante si se tiene en cuenta que es la zona destinada a acoger a las aficiones visitantes y que en muchos encuentros está vacía de espectadores al no arrastrar público algunos rivales que acuden a Anduva.

Cabe recordar que ya en 2012, 2013... hubo negociaciones con el propietario de los terrenos anexos, que exigía un canon, sin que hubiera acuerdo. Desde entonces, la permanencia de estas tribunas provisionales ha supuesto un notable gasto para las arcas del club.

Hace años que se demanda por parte de la entidad rojilla alguna actuación con el fin de desbloquear esta situación, como bien pudiera ser llevar a cabo una permuta de terrenos por parte del Ayuntamiento o que la administración local proceda a la expropiación. Se considera que no tendría que ser complicado llegar a un consenso para que Anduva pueda extenderse también por ese fondo y que el estadio al completo presente un aspecto más profesional y acorde a lo que dicta LaLiga.

La actual es una situación, de momento, sostenible siempre y cuando el primer equipo jabato juegue al menos en Segunda, categoría que tiene confirmada desde hace tiempo para el curso que viene, o en Primera División, tal y como existe la posibilidad en función de cómo transcurre la actual temporada. No sería posible seguir con estos pagos en escalafones inferiores. Sería inviable gastarse más de 70.000 euros por este concepto en Primera RFEF.

Si se diera el caso y existiera un acuerdo entre el Consistorio y la propiedad, desde el club ya se ha señalado en varias ocasiones que estaría dispuesto a rematar el estadio por esa zona, con la construcción de una grada, que sería más pequeña lógicamente que la ahora proyectada para la Tribuna Principal, con el propósito de dejar cerrado ya de forma definitiva el estadio de Anduva.

Pero claro, el Mirandés tiene las manos atadas en ese sentido porque no puede hacer más de lo que ya hace. ¿Un hipotético ascenso a Primera División podría cambiar las cosas? Desde las oficinas de Francisco Cantera se apuesta porque así sea, aunque carece actualmente de capacidad de maniobra.

Esta es una historia que perdura en el tiempo. Prácticamente desde que subió el Mirandés al fútbol profesional, que es cuando se demandó un pago al club por ocupar una parte de esos terrenos.

La situación no ha variado y mientras tanto se abonan cada año cantidades por disponer de las gradas y por estar instaladas en suelo de carácter privado. Acciones que siempre merman a un club modesto.