Lugo da inicio a una semana que puede marcar la temporada

Hace varias jornadas que en el entorno rojillo se habla de final cuando se acerca el domingo, pero el margen de error cada vez es más reducido, para el equipo y para Joseba Etxeberria. El técnico está muy cuestionado y un nuevo tropiezo en tierras gallegas le dejaría al borde del abismo.

El técnico no esconde que la situación es delicada, pero también defiende la evolución de un equipo al que se le han escapado puntos en los últimos compromisos de forma injusta. En su opinión, la clasificación no refleja el juego de los rojillos, que han pagado muy caro pequeños despistes en los momentos decisivos de los encuentros. Por eso, durante la semana ha incidido en la necesidad de ser más competitivos.

En los futbolístico, la variante de cinco defensas empleada contra el Huesca ha convencido a Etxeberria, ya que otorga más consistencia defensiva y permite a los laterales sumarse al ataque. Al Mirandés le cuesta generar peligro por las bandas, y con ese esquema, tanto Salinas como Parra tienen más recorrido para sumarse desde la segunda línea. Todo apunta a que repetirá dibujo en el Anxo Carro aunque con cambio de nombres, ya que la acumulación de partidos obliga a tirar de rotaciones, aunque Etxeberria ha dejado claro que la realidad clasificatoria impide mirar más allá de Lugo.

Los rojillos se medirán a un rival que en las últimas temporadas ha logrado la salvación in extremis y que esta campaña también está llamado a luchar por la salvación. Los gallegos ocupan ahora mismo puestos de descenso, aunque la victoria lograda contra el Burgos ha elevado la moral de sus jugadores. Los de Calero, que eran de los pocos clubes europeos que permanecía invicto, mordió el polvo en el Anxo Carro, un campo que no trae grandes recuerdos al Mirandés.

Los rojillos perdieron una vez la categoría en el feudo gallego, aunque posteriormente la recuperaron en los despachos por el descenso administrativo del Real Murcia. En todas sus visitas, solo han logrado una victoria, y los números de la presente temporada tampoco invitan al optimismo porque los de Etxeberria son el peor visitante de Segunda. Sin embargo, el colista no puede detenerse a mirar las estadísticas. Si quiere salir del pozo de la clasificación está obligado a sumar puntos en todos los estadios.

En el Lugo, Hernán Pérez medita repetir el 4-4-2 que le dio resultado ante el Burgos. La prioridad del técnico, como ha reconocido públicamente, es afianzar la línea defensiva ya que los gallegos son uno de los conjuntos que más veces ha visto perforada su portería. Esa falta de solidez es la que le ha condenado a uno de los puestos de descenso, lugar del que confía en salir este mismo fin de semana. El míster esperará hasta última hora a Manu Bareiro, que llega tocado a la cita.

El partido en el Anxo Carro da el pistoletazo de salida a una semana crucial para los intereses del Mirandés, que tiene dos duelos contra rivales directos en la lucha por eludir el descenso, Lugo e Ibiza. Ambas citas son a domicilio, mientras que entre semana es el Tenerife, un gallito que atraviesa por malos momentos, el conjunto que visitará Anduva. Es la hora de dar un paso al frente, ya que si esta semana el equipo tampoco logra buenos resultados, comenzaría a descolgarse en la clasificación.