Fran Justo es el principal candidato a entrenar al Mirandés

Si finalmente asume las riendas del cuadro jabato se convertirá en el entrenador más joven de la categoría junto a Ibai Gómez, preparador del Andorra. Fran Justo cumplirá el próximo mes de agosto 36 años. Dirigió al Algeciras el pasado curso y alcanzó con creces el objetivo de la permanencia en el grupo segundo de Primera RFEF.

Además, Justo consiguió llevar al Algeciras a pelear por los puestos de play off de ascenso a Segunda. Acabó en la novena plaza, a seis puntos del quinto clasificado, que es el último que juega por el ascenso en 1ª RFEF.

El gallego no se estrenará en el fútbol profesional, ya que en la temporada 2022/23 dirigió al Lugo en la categoría de plata. Por lo tanto, Fran Justo volverá a reencontrarse con la Segunda División tras una experiencia en el Anxo Carro que solo duró 9 jornadas. Además de al Algeciras y al Lugo, ha entrenado a Real Unión, Arenteiro y Ourense, donde empezó muy joven desde las categorías inferiores de este club, el de su ciudad natal.

Desde la entidad andaluza se comunicó el pasado 9 de junio que técnico y club separaban sus caminos. ¿El motivo? Justo quería subir un peldaño en cuanto a ambición y competir por cotas mayores. En este sentido, ya se comentaba que estaba a la espera de propuestas de la categoría más cercanas a su tierra e incluso se apuntaba el interés de equipos con rango de play off y hasta de Segunda División, donde podría recalar si los contactos que mantiene con el Mirandés no se tuercen y llegan a buen 'puerto'.

No sería de extrañar que en los próximos días el orensano se desplace a Miranda o que se rubriquen las negociaciones con un acuerdo definitivo.

Quien ha seguido su trayectoria al menos en los últimos tiempos destaca que se trata de un entrenador ambicioso y de gran proyección, que apuesta por un fútbol ofensivo, en el que su equipo debe ser el protagonista.

Vamos, que responde a la perfección, en todo, al perfil que se busca para capitanear la nave del Mirandés. Cumplir con las características que se persiguen: técnico joven, con proyección, que sabe manejar vestuarios pipiolos y con gusto por un fútbol vistoso en el sentido de presentar un estilo atacante.

El objetivo es que su plantilla tenga personalidad en el campo, que es lo que ha tenido el Mirandés del curso 24/25. Paciencia tanto él como el mirandesismo con el propio entrenador es lo que hace falta ahora, máxime después de que se haya puesto el listón tan alto con la mejor temporada de la historia del primer equipo jabato.

Alessio Lisci también lo demandó en su despedida, el pasado lunes, cuando significó que el reto que siempre debe tener en mente es la permanencia y llegar cuanto antes a los cincuenta puntos, que son los que se estiman necesarios para salvar la categoría.

Justo apunta a ser el míster en la duodécima campaña del modesto club rojillo en el fútbol profesional.