IU reclama que se actúe en el vertedero para evitar que siga contaminando
Insta a la Junta a revisar el sellado y reclama al Consistorio información y transparencia sobre los metales detectados en las aguas subterráneas
Cuatro años después de su sellado, el vertedero de la ciudad sigue siendo un foco de problemas medioambientales, según volvió ayer a denunciar públicamente Izquierda ... Unida, tras tener conocimiento de un escrito remitido este mismo verano por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) al Ayuntamiento, advirtiendo que se habían encontrado «indicios de una nueva contaminación en el subsuelo» de ese antiguo depósito de residuos sólidos urbanos, que podría estar afectando a la masa de agua subterránea que discurre de Pancorbo a las Conchas de Haro.
Arsénico, cromo y níquel son algunos de los metales pesados hallados «en niveles anormalmente altos» en los medidores ubicados en zonas próximas a esa instalación ya sin uso, como Los Corrales e Ircio, y sobre los que el organismo de la cuenca ha solicitado los resultados de los análisis de 2020 y del ejercicio en curso, para conocer la evolución de esos y de otros contaminantes comparándolos con los datos de que dispone relativos a 2019.
«Las aguas de los subsuelos acaban, por lo general, en la cuenca más cercana, que no deja de ser la del río Ebro»
Por tanto, se trata de una situación ya conocida y «reiterada» de la que son conscientes tanto en la CHE como en el Consistorio pero que, denunció IU nunca hasta la fecha se ha hecho pública, como tampoco se ha informado sobre los requerimientos de información de la entidad. Algo que considera muy preocupante la formación.
«Las aguas de los subsuelos acaban por lo general en la cuenta más cercana, que no deja de ser el río Ebro», valoró el portavoz de IU, Guillermo Ubieto.
Si bien, en principio, lo que ha apuntado la Confederación es que la contaminación procedente del vertedero está afectando a la masa de agua que discurre entre Pancorbo-Conchas de Haro (denominada como 006) y por tanto también a una zona Zepa, de protección de aves, de Montes Obarenes que incluye parte de San Juan.
«Nos parece especialmente peligroso», incidió Ubieto; que teme que la situación siga empeorando si no se toman medidas encaminadas a mejorar el sellado del vertedero, ya que «parece que el procedimiento no ha sido el adecuado». De otro modo, no se entiende la contaminación al subsuelo por metales pesados que se sigue detectando en el entorno.
La CHE solicitó a final de julio al Ayuntamiento los resultados de los análisis de 2020 y 2021
«La Junta de Castilla y León debería dar explicaciones y el Ayuntamiento, como responsable de la gestión de los lixiviados para que no acabasen en el subsuelo, también deberá hacerlo», abundó el portavoz de IU; al tiempo que reprochaba a la Concejalía de Medio Ambiente que «no haga pública la situación y no se avise a la población de los indicios de contaminación en aguas de subsuelo procedentes de este vertedero».
De hecho, pidió que se les de traslado formalmente de los datos que ya se han tenido que remitir a la CHE sobre los análisis de 2020 y 2021 (la entidad daba para responder un plazo de un mes y éste acabó a últimos de agosto). «Queremos ser conocedores de la salud de nuestras aguas».
Pero también reclaman al Ayuntamiento que haga público cualquier informe en materia de incumplimiento de vertidos que le remita la CHE. «Además de no verter hay que informar y ser transparentes», zanjó.
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