El PP denuncia la existencia de vados irregulares y con horarios modificados en Miranda

«Suben el impuesto de circulación pero los servicios que se dan cada vez son peores», asegura Charo Fernández, que ha realizado un exhaustivo censo de los vados que hay activos y sus condiciones. De los 971 propietarios que pagan su tasa por garantizar el acceso a sus garajes, 589 son vados permanentes que deben estar libres todo el día. El resto pertenecen a empresas o tienen la categoría de autorizados, es decir que abonan solo por unas horas diarias.

El nivel de cumplimiento en el pago, que roza el 100% ya que apenas hay morosidad en este impuesto, contrasta con el escaso mantenimiento de las placas. «Algunas tienen un aspecto deplorable que hace hasta dudar de si están vigentes», afirma la edil de los populares, que ha detectado numerosas irregularidades. La más conflictiva es la modificación aleatoria que hacen algunos propietarios de las horas de uso sin haberlo notificado a la administración local. «Como saben que el Ayuntamiento no lo controla, cada uno hace lo que le viene mejor», lamenta Fernández.

Pero la lista de incumplimientos es extensa. La ordenanza recoge que no se pueden habilitar vados a poca distancia de pasos de cebra, algo que no siempre se cumple. Otros tienen que atravesar con el coche para entrar y salir aceras con una anchura superior a la permitida, sobre todo tras las últimas reformas de calles del centro.

En el censo de vados también están los que cuentan con árboles o bancos dificultando el acceso, los que han añadido frases no permitidas como que se avisa a la grúa o directamente no tienen bordillo pintado de amarillo como marca vial y han añadido chapas o elementos prohibidos para eludir la barrera arquitectónica. «Es un desatino y un caos», afirman desde las filas del PP, que piden al Ayuntamiento un nuevo sistema de control a través de QR para que, tanto los agentes de Policía Local como los ciudadanos, puedan revisar si el vado cumple con la normativa simplemente con el móvil. Además, el principal partido de la oposición reclama al equipo de Gobierno que haga cumplir la ordenanza aprobada en su momento y que unifique las placas para que todos los conductores puedan atenerse a un mismo criterio. «No es normal que ahora tengas que bajarte del coche para ver los horarios y aún así tengas dudas porque cada uno tiene un color, están cambiados o directamente medio borrados», denuncian.

Aunque los garajes con acceso regulado están repartidos por toda la ciudad, hay calles especialmente conflictivas tanto por su elevado número como por el estado de los mismos. Según el informe realizado por los populares, los puntos más calientes son Santa Lucía, Arenal y el barrio de La Charca. «Aparcar en muchos de estos lugares es una odisea», apuntan.

Las arcas municipales ingresan anualmente 400.000 euros por los vados, cifra a la que hay que sumar el dinero por el impuesto de circulación, la zona azul o las multas. En total, son más de tres millones de euros los que percibe la administración local por todos esos conceptos, lo que representa el 7% del presupuesto y casi la misma partida que se destina a inversiones para mejorar la ciudad.