Miranda reclama un papel destacado en los trabajos para las empresas locales
FAE pide que se apliquen criterios de discriminación positiva en las licitaciones y la Cámara de Comercio que se tenga en cuenta la experiencia de décadas
FAE confía en que el desmantelamiento de Garoña sea una gran oportunidad laboral para las empresas de Miranda y la comarca que podrán tener cabida ... en la realización de muchas tareas que a lo largo de la próxima década se van a realizar en una central donde las han hecho durante décadas. Pero para que eso sea posible, piden a Enresa que se fragmenten los trabajos en lotes a los que puedan acceder las pymes y que los requisitos de avales y de sostenibilidad económica sean asumibles por pequeñas empresas, para que puedan participar en los concursos públicos.
Temen que los contratos acaben en manos de grandes corporaciones, sin presencia en la provincia o la región, que luego subcontraten a empresas de la zona y «la riqueza no se quede en esta tierra, cuando son trabajos que se pueden hacer desde aquí», recalcó la secretaria de la entidad, Emiliana Molero; que reclamó que se tengan en cuenta criterios de 'discriminación positiva' que se pueden aplicar en de la ley de contratos del sector público.
Aspectos, además de la fragmentación por lotes, como pueden ser el impacto en la huella de carbono de las empresas que van a trabajar en Garoña, que tienen claro que no va a ser el mismo si se está a 500 kilómetros que si la sede esta en Miranda. «Si nos piden alguna propuesta o sugerencia, se la haremos. Siempre hemos estado ahí y las veces que hemos contactado con los técnicos de Enresa las facilidades han sido todas. Nuestras empresas tienen el conocimiento, la experiencia, la capacidad y les tienen que permitir que puedan licitar. Eso lo tenemos que dejar muy claro».
Por otro lado, Molero, avanzó que dentro del departamento de subvenciones y ayudas de FAE «vamos a abrir un apartado para el Plan Garoña por la relevancia que tiene».
También el presidente de la Cámara de Comercio, Fernando Escobillas, confía en que la experiencia de décadas de las empresas de Miranda acabe pesando de alguna manera en la contratación. «Hay mucha gente en talleres de la ciudad que conoce la planta desde su construcción y los trabajos que se tienen que hacer; y su labor, por tanto, va a ser mucho más efectiva. A Enresa le interesa que quien entre tenga experiencia y a esa gente la tiene aquí».
Además cree que se deberían arbitrar requisitos que prioricen a las empresas locales porque son las que se han visto más perjudicadas por el cierre de la nuclear y ese desmantelamiento «va a dar vida a la zona».
Del mismo modo, el concejal de Promoción Económica, Miguel Ángel Adrián, que considera el anuncio del desmantelamiento «una buena noticia» para la economía y el empleo de Miranda y su entorno, cree que es importante que las empresas locales «puedan adjudicarse, sea mediante contratación directa con Enresa, o por la vía de la subcontratación, parte de esos trabajos que precisarán mano de obra especializada».
Y es que Adrián también comparte que hay que poner en valor «la experiencia» de los talleres de montaje y mantenimiento que durante muchos años han colaborado con Nuclenor en las 'paradas'. Además, confía en que esas tareas durante la próxima década contribuyan a «seguir reduciendo el nivel de desempleo» de Miranda, actualmente «en la cifra más baja de los últimos doce años».
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