Miranda se anima a leer

La instalación tiene registrados 9.728 usuarios, de los que 941 se incorporaron el pasado ejercicio, año en el que los libros estrenaron edificio. La cifra marca un aumento del 10,7% sobre periodos anteriores en los que los nuevos socios ha rondado el medio millar.

Además, la nueva biblioteca ha servido para atraer a un mayor número de adultos hacia la lectura, ya que de todos los carnets expedidos, 587 tienen como titulares a adultos y 350 a niños, cuando en memorias anteriores eran los menores los que inclinaban la balanza a su favor. Un cambio que, como señalan las responsables de a instalación, «no es un dato meramente anecdótico», sino que el aumento se hace notar en lo que se refiere al usuario habitual del servicio «en demanda y necesidades a cubrir».

Lo que no ha variado es que el público lector femenino sigue siendo el «más fiel y numeroso». La cifra de mujeres socias superaba en 1.301 a la de hombres al concluir el pasado ejercicio. Ellas eran titulares de 5.510 carnets y ellos de 4.209. Una diferencia que se va generando según cumplen años los lectores, ya que en la edad infantil (hasta 14 años) apenas hay diferencias. 2022 concluyó con 965 niñas con carnet y 942 niños, que eran 23 menos. Pero si la comparativa se centra en los adultos, ellas son 4.545 y ellos, 3.267.

Pero pese al aumento de lectores y a que la nueva biblioteca ha supuesto un revulsivo para la actividad, el número de préstamos, aunque ha dejado atrás el bajón sufrido por la pandemia, aún no ha alcanzado el pico que se registró en 2018, cuando se contabilizaron 24.555 entregas de material. En el último año no se ha alcanzado ese número, aunque se ha quedado cerca. En total fueron 21.181 (casi 3.400 menos). Eso sí, es una cifra a la que se ha llegado tras retoman los escuetos datos con los que concluyó el periodo en el que se desató la pandemia: 10.383.

Pero también hay que tener en cuenta que los servicios digitales van ganando peso, lo que permite acercar el total de préstamos a las cifras récord de 2018. En el último ejercicio se han contabilizado por parte de usuarios mirandeses 2.259 documentos de lectura eBiblio, por parte de 267 usuarios, que también dispusieron de 289 materiales audiovisuales de CineCyL. Sumando formatos físicos y digitales se prestaron 23.720 unidades. Sólo unos 800 menos que cuatro años antes. Noviembre, con 2.580 préstamos fue el mes con más actividad durante el pasado año, seguido de marzo (2.093) y diciembre (2.010).

De todos los préstamos registrados, 11.514 se hicieron con tarjeta de lector de adulto y 9.667, infantil. Y, en su mayoría, se recogieron libros y casi el doble de temática infantil: 13.054. En ese ámbito niños y niñas sintieron preferencia por 'La Casa encantada de los números', 'Érase una vez el cuerpo humano' y 'Unicornio'

Los adultos recogieron a lo largo del pasado año 7.096 ejemplares, poniendo especial atención a poder acceder a leer 'La Bestia', de Carmen Mola (seudónimo de Jorge Díaz, Agustín Martínez y Antonio Mercero); 'El libro negro de las horas', de la alavesa Eva García Sáenz de Urturi; 'Violeta' de Isabel Allende; 'Aquitania', también de la vitoriana; y Los silencios de Hugo', de Inma Chacón.

Además, en 2022 se registraron hasta 272 préstamos de materiales que se solicitaron a otras bibliotecas de la red de Castilla y León, fueron más del doble que en el ejercicio anterior, quizá impulsado por la actividad de los tres clubes de lectura que están en marcha en la Biblioteca Cervantes. Y es que se busca así evitar que los participantes tengan que adquirir muchos ejemplares de los títulos elegidos.

De los grupos que funcionan el más antiguo es Miranda Impresa, del que forman parte 24 personas que se reúnen quincenalmente. Otro lo conforman dos grupos de usuarios de Aspodemi, que acuden una vez a la semana cada uno; y el tercero, es el Club de lectura fácil del Príncipe de España. La oferta de wifi también ha resultado atractiva, ya que se ha calculado que se iniciaron 52.612 sesiones.

Los datos en su conjunto evidencia lo que para las responsables de la Biblioteca Cervantes es, en el año de apertura, «un éxito rotundo», ya que se han batido récords en el número de socios, de visitas, de uso de ordenadores...».

Visión compartida por la concejala de Cultura, Montse Cantera, para quien «a apertura del nuevo edificio se ha notado mucho en cuanto al número de socios y también de visitas. La biblioteca ha ganado visibilidad y la gente se ha animado más a acudir».