El Centro Ocupacional de Fuentecaliente en Miranda renovará sus cubiertas y el ascensor

Un dinero del que casi la mitad, hasta 7.000 euros, se van a destinar a la sustitución del tejado del taller del que dispone el complejo para eliminar las goteras. Objetivo que no es posible hacer actuando sólo en el punto por el que se filtre el agua, ya que se trata de una cubierta construida con uralita, un material cuyo uso en este momento está prohibido y que, además, para retirarlo, se requiere de la presencia de una empresa autorizada para trabajar con amianto. De ahí el coste de renovar esa parte de la instalación.

El agua es también el problema que va a llevar a intervenir en la terraza del edificio principal del centro ocupacional. Las filtraciones afectan directamente al comedor de la casa, generando humedades importantes. Ese es el motivo de que se haya previsto instalar un aislamiento en toda esa zona, contando para ello con un presupuesto de 4.000 euros. Una vez llevada a cabo la obra y cuando se haya secado la humedad que ahora afecta al interior, se pintará toda la sala. Un trabajo para el que se ha reservado una partida de 1.000 euros.

Las intervenciones pendientes para este verano se completarán con la renovación del ascensor. Una actuación obligada por ley para que el elevador se adapte a los nuevos requerimientos de la normativa ahora en vigor. Según está no los cumple y tras la última revisión realizada se solicitó que se llevarán a cabo las modificaciones necesarias para que entrara dentro de lo marcado en la norma. Para ello, se cuenta con una partida de 3.000 euros.

En total, 15.000, que Servicios Sociales ya tiene disponibles para contratar los trabajos una vez que el Consistorio ha aprobado las modificaciones de créditos para pasar dinero de partidas con excedente a la realización de estos trabajos que Aspodemi, la asociación encargada de la atención a la discapacidad intelectual de la ciudad, considera «necesarios y urgentes».

De ahí que, la actual directora de Servicios Municipales de la entidad, Virginia Ibáñez, haya agradecido la buena disposición y la celeridad del Consistorio a la hora de atender unas mejoras que se han puesto sobre la mesa en las últimas semanas, en las reuniones mantenidas con técnicos municipales, una vez que Aspodemi asumió el 1 de mayo, con la firma del nuevo contrato, la gestión del centro y los servicios que se prestan. Porque también desde entonces, con personal municipal, se han venido realizando algunos pequeños trabajos de mejora pero muy necesarios, como pueden ser la sustitución de un cuadro de luz o el cambio de algún radiador.

Evidentemente, al tratarse de un complejo con muchos años, aún siguen quedando tareas pendientes, pero más de «carácter estético», como el pintado de las fachadas del edificio principal, que presentan algunos desconchones, aunque no generan humedades, o el lijado y barnizado de la madera del balcón y las contraventanas.