Afami se prepara para ser, «como van a obligarnos» un centro sanitario
Desterradas las restricciones obligadas por la pandemia, la normalidad es absoluta y atiende a 130 usuarios
La labor que se lleva a cabo en Afami es de sobra conocida en la ciudad y, dados precisamente los servicios que se prestan en ... sus dependencias «dentro de un tiempo, no sabemos si poco o mucho, nos van a obligar a convertirnos en un centro sanitario. Ahora mismo la catalogación que tenemos es la de centro sociosanitario», apunta la presidenta de la entidad, Eulalia Mallofré.
No pone sobre la mesa plazos temporales porque lo único que sabe en estos momentos es que la normativa les va a obligar. «Ya se nos dijo que sería así antes de la pandemia, pero después de que llegara el covid está ahí la normativa pero por más que hemos preguntado todavía no hemos conseguido saber cuándo tendremos que hacer efectivo ese cambio que va a ser obligatorio».
En el primer momento en el que supieron que tendían que adaptarse a esta novedad se informó sobre las novedades que iban a convertirse en una realidad para Afami obligatoriamente. En el primer momento las psicólogas no eran personal sanitario «pero en cuanto se nos comunicó que tendrían que serlo nuestras psicólogas hicieron el máster que necesitaban», y desde ese instante, apunta la presidenta de Afami que «en todas las contrataciones de personal que hemos hecho se ha pedido ese requisito, así que está claro que hacemos las labores de un centro sanitario y nuestro personal cumple los requisitos que se requieren».
Lo que aún tienen pendiente en las instalaciones de Afami es la realización de algunas obras «que pueden considerarse menores si tenemos en cuenta lo que nos costarían, porque creemos que significarían una inversión que no alcanzaría los diez mil euros».
Necesitan hacer obras para construir lavabos en un buen número de dependencias del centro
Explica Mallofré que tras la última visita de quienes certificarán la idoneidad de las dependencias de Afami para convertirse en centro sanitario -inspectores de Sanidad- ha quedado patente que «lo tenemos todo bien, y lo único que nos falta es poner lavabos en muchos sitios y, para eso tendremos que hacer obra».
La pandemia dejó todo en suspenso y, además, Afami tuvo que restringir sus servicios reducir obligatoriamente el número de usuarios. Ahora «todo ha vuelto a la normalidad y estamos ya trabajando otra vez con 130 personas». Y esta situación es la que ha hecho que desde la entidad se estén planteando la necesidad de «estar preparados para cuando nos toque hacer el cambio».
Va a ser una realidad pero se desconocer el momento en el que habrá que hacerlo y cree Eulalia Mallofré que «en el momento en el que nos lo hagan saber entiendo que nos darán un plazo razonable para hacer esas obras que necesitamos. De todos modos queremos estar preparados para no vernos sorprendidos», zanjó.
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