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Cristina Ortiz
Viernes, 25 de abril 2025, 15:02
El crecimiento económico, unido a la edificación de instalaciones industriales, y el aumento en la demanda de viviendas conlleva un repunte en la actividad de ... la construcción y, con ella, también un incremento de la siniestralidad laboral vinculada a ese sector en la comarca; que, el año pasado, registró 65 accidentes. Ocho más que en la estadística de 2023, lo que supone un aumento porcentual del 14%. De todos ellos, la gran mayoría tuvieron un carácter leve. Ésa fue la catalogación de todos salvo uno que fue considerado como grave y que también marca la diferencia respecto del balance previo, ya que en 2023 esa casilla se quedó a cero.
En total, según recoge el balance de la Secretaría de Salud Laboral de Comisiones Obreras, en la comarca a lo largo del pasado ejercicio se registraron tres incidentes graves, el vinculado a Construcción y dos más en Servicios, que en 2023 había contabilizado uno en ese apartado.
Pero sin duda, la estadística más negativa la arroja Industria, con dos víctimas mortales. Un varón de 37 años que murió a mediados de mayo del año pasado al caerle encima una pieza metálica cuando trabajaba en una empresa de transformados siderúrgicos de Pancorbo; y un joven de unos 20 que falleció en un hospital de Vitoria en enero días después de caerse de una escalera en Las Matillas, cuando estaba instalando un conducto de gas en una fachada. Siniestros mortales que movieron una estadística que el año previo se había quedado a cero.
Al margen de esos hechos, el sector acabó 2024 sin registrar ningún accidente grave –cuando el ejercicio anterior hubo uno– y dos menos de carácter leve. Se notificaron 174 entre enero y diciembre del pasado año. En total, 176, que implican un descenso muy leve de la siniestralidad en ese ámbito.
Porcentualmente, en la estadística llama la atención de manera negativa el aumento de los accidentes en el sector agrario. Subieron un 140%, al pasar de 5 en 2023 a 12 en 2024. Eso sí, todos ellos de carácter leve.
El ámbito de trabajo que recoge más incidentes es Servicios, con una balance anual de 330, que suponen casi un 4% menos que los contabilizados en el ejercicio anterior, que acabó con 343, lo que supone una reducción de casi el 4%. Eso sí, figura que hubo dos casos graves, cuando en la estadística del ejercicio anterior aparecía uno.
Fuera del análisis queda también la muerte en el primer mes de 2024 de un operario mirandés de 53 años al quedar atrapado bajo una máquina en una explotación minera de Peñacerrada. Al producirse en Álava el hecho, no se refleja en la estadística que maneja el departamento de Trabajo de la Junta.
De manera global, el balance del que dispone Comisiones Obreras muestra un total de 582 siniestros laborales en la comarca mirandesa durante el pasado ejercicio, un número exactamente igual que el de 2024. Cifra a la que hay que sumar los accidentes en itinere, que fueron un total de 46, uno más que en 2023; y todos de carácter leve.
Pero, aunque la gravedad es importante, cualquier accidente de trabajo, «además de suponer un drama personal y familiar, demuestran que las condiciones de trabajo son inseguras e injustas», apuntaba la secretaria comarcal de CC OO, Leticia Ruiz de Arcaute; que reclamaba «el cumplimiento estricto» de la normativa de prevención de riesgos laborales.
De hecho, es un ámbito en el que el sindicato confía en poner el foco a partir de ahora, en cuanto se ultime la contratación de un técnico de prevención que la sección comarcal compartirá con la de Aranda. «Es una buena noticia».
Es algo que echaban de menos desde que la entrada de Vox en el gobierno regional conllevará la reducción de fondos para estos programas que gestionan los sindicatos. Será el encargado de acudir a las empresas a verificar que se cumplen las normativas, hacer valoraciones de los puestos y de los riesgos más frecuentes. «Está demostrado que cuando la prevención funciona, los riesgos diminuyen», destacó Ruiz de Arcaute.
En el cómputo de Castilla y León, la Secretaría de Salud Laboral del sindicato registró durante el pasado año 27.102 accidentes en el puesto de trabajo, un 1,38% más que en el año previo. Algo más, un 4,6%, subieron los siniestros in itinere, hubo 2.981. En total, se notificaron 30.083 casos que conllevaron baja laboral. Pero sin baja tienen contabilizados otros 34.796. En total, 64.879, casi los mismos que en 2023.
Además, a todas estas cifras hay que sumar 1.095 notificaciones de enfermedades laborales en la región, de las que 496 conllevaron una baja. De ellas, 216 estuvieron vinculadas a trabajos en Industria y 231, a Servicios.
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