Esto es lo que tienes que hacer para cobrar un décimo roto que ha sido premiado en la Lotería de Navidad
El sorteo se celebrará el próximo 22 de diciembre por la mañana
G. C.
Miércoles, 29 de octubre 2025, 18:40
Los décimos de la Lotería de Navidad son relativamente frágiles y a veces los jugadores se llevan más de un susto. Un día de lluvia que moja su papel, un pequeño desgarro... Y, claro, surge el miedo de no poder cobrar el décimo si resulta agraciado. Imagina que es un pellizco del Gordo y no puede cobrarse... pero tranquilidad.
Si resulta premiado, lo más importante es que no cunda el pánico y evitar cualquier tipo de manipulación. Eso solo puede empeorarlo todo. Lo más correcto es enviarlo a Loterías y Apuestas del Estado para que pueda determinar su validez. En caso de que se encuentre en muy malas condiciones, se traslada a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, cuyos expertos determinarán su validez a través de avanzadas técnicas de comprobación.
Si todo va bien y se confirma su validez, hay que tener en cuenta que hay una fecha límite para cobrarlos. El límite es de tres meses desde el día siguiente a que se celebre el sorteo. Una vez expirado este periodo, si el jugador no ha reclamado, el importe se lo embolsará Hacienda. Y no hay forma de reclamar ese dinero.
Otro aspecto a tener en cuenta es dónde cobrarlo. Depende de la cantidad. Aquellos premios que superen los 2.500 euros deberán reclamarse en alguna de las entidades financieras habilitadas por Loterías y Apuestas del Estado. Las cuantías menos abultadas podrán cobrarse en cualquier administración. En caso de haber adquirido el décimo a través de una participación, se deberá acudir a la entidad correspondiente para completar la recaudación.
Impuestos
El fisco se suele quedarse con el 20% de lo ganado en los grandes premios. No es un porcentaje específico para la Lotería de Navidad, ni mucho menos. Es lo que se aplica a todo premio que exceda los 40.000 euros. En los concursos de la televisión, la Bonoloto, el Euromillones... En el caso del Gordo, entonces, cada cantidad agraciada del décimo tributará por 360.000 euros (quedan exentos los primeros 40.000 euros), ya que Hacienda se queda con el 20% de esta cantidad (72.000 euros). El ganador se embolsará 328.000 euros.
En el caso de cada décimo del segundo premio, dotado con 125.000 euros, se tributaría por los 85.000 euros no exentos. Hacienda se queda con 17.000 euros y el ganador, con 108.000 euros. Los afortunados con un décimo tercer premio (50.000 euros) tendrán que tributar 2.000 euros y se quedarán con 48.000 euros, mientras que el resto de premios está exento por no alcanzar los 40.000 euros.