Belako, un talento único del rock vasco para «criticar el mundo»
La banda de Mungia presenta este jueves 'Plastic Drama' en el Iradier Arena junto a Niña Coyote eta Chico Tornado. «Somos jóvenes con suerte por decir lo que pensamos ante un micro»
Es difícil encontrar un arranque tan poderoso y rotundo como 'Sea of confusion', la canción que abría su disco debut, 'Eurie' (2013). Ese inicio, tan enérgico y luminoso, podría haber sido el despegue de una carrera en caída libre. Sin embargo, a lo largo de sus cuatro discos han seguido dejando pistas para el recuerdo –como 'Tie me up', 'Truth', 'Maskenfreiheit' o 'Sinnerman'–; a un público extasiado en directo y la confirmación de que Belako es una de las mejores formaciones vascas del momento. Su último trabajo 'Plastic Drama' lo presentan hoy en el Iradier Arena (19.30 horas, 17 euros) junto a una pareja de lujo, Niña Coyote eta Chico Tornado, abriendo el concierto.
La banda era uno de los nombres en el cartel de fiestas de La Blanca de 2020. Sin embargo, los conciertos en la plaza de los Fueros tendrán que esperar al menos un año. Aquella fue una de las citas que cayeron en la cascada de cancelaciones que afectó a todas las bandas. En el caso de la formación de Mungia más si cabe, ya que venían siendo uno de los nombres más repetidos en los festivales de verano. «La verdad es que al principio fue un poco depresivo, sobre todo teniendo en cuenta que se nos cayó toda la gira internacional», cuenta Lander Zalakain, batería del grupo formado junto a la cantante Criz Lizarraga, el guitarrista Josu Billelabeitia y la bajista Lore Nekane Billelabeitia.
En marzo de hace un año tuvieron que coger un avión de vuelta desde Estados Unidos, donde estaban de gira, y dar alas a otros proyectos de estudio. «Nos fuimos adaptando y al final hemos tocado bastante y hasta hemos podido sacar un disco en mitad de la pandemia. Intentamos verle el lado positivo y hemos aprovechado para estar más en casa o incluso para tocar más por la zona».
Los actos del día
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Teatro y humor 'Asesinos todos' (19.00, Principal) y Óscar Terol (Rincón del Humor, en el Prado, 19.30).
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Conciertos Moni Garage (13.00), Belako (19.00).
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Pelota Torneo Virgen Blanca (11.00, Ogueta).
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Infantil Espectáculo 'Jolasean isasi, musikaz Isasi' (12.00, palacio Zulueta).
Ese cuarto álbum se llama 'Plastic Drama' y es uno de los más aclamados del conjunto que tiene el inglés como principal idioma en sus letras. También es el trabajo con el que ganaron el reconocimiento a Mejor Álbum de Rock en los Premios de la Música Independiente (MIN), cuya gala se celebró en junio. Los galardones los guardan por casa y en el local de ensayo, «un poco desperdigados», comenta entre risas Zalakain, encargado de pronunciar un discurso tras recoger la estatuilla. Los aplausos tronaron cuando se quejó de la «precariedad que ya había antes del covid» en el mundo de la música.
– ¿La pandemia ha servido como excusa para bajar los cachés a los artistas?
–Es inevitable que los cachés bajen habiendo menos gente en los conciertos, eso es así. Otra cosa es que hablamos de un sector sin regular y con una precariedad brutal, también en tiempos no pandémicos. Sin duda esperamos que las autoridades despierten al ver que con el covid se ha tocado fondo y cambien las cosas.
De alguna manera, esa reivindicación se cuela también en el repertorio sin recurrir a una proclama con descargas eléctricas y también un sonido electrónico. De su último trabajo se desliza sentido crítico hacia el consumismo desenfrenada y al papel de la tecnología como herramienta para el hedonismo. «En cuanto al significado de 'Plastic Drama' y los diferentes temas, era inevitable hablar o reivindicar ciertas cosas, al fin y al cabo somos jóvenes y tenemos la suerte de que nos ponen un micro para decir lo que pensamos y criticar el mundo y los sistemas que lo rigen».
La formación también encabeza una generación de rock alternativo surgido en Mungia con nombres como Toc, Sua o Lukiek, en la que toca el guitarrista. A fin de cuentas no sería de extrañar que se recordara el buen momento. Al igual que hubo un movimiento Getxo Sound en los ochenta... «Creo que ya se puede hablar de un Mungia Sound, puede que con otro nombre (risas). Pero desde luego, hay un nivel altísimo en Mungia y la zona». Antes de subirse al escenario dicen que no tiene un ritual más allá de un gesto de confianza. «Siempre nos damos cachetes en los culetes antes de subir al escenario, es algo que se ha quedado desde el primer día y funciona».