La comida es un juego en Lvdvs (Vitoria)

El restaurante Lvdvs se inauguró el 18 de diciembre de 2014 de la mano de Txema Martínez de Alegría, un cocinero con más de 20 años de experiencia en el oficio. Sus platos se han podido probar en restaurantes como La Casa del Patrón, Río Florida o el Hotel Barceló Gasteiz, donde estuvo doce años hasta su cierre. También estuvo de stage en Barcelona en el restaurante de dos estrellas Michelin de Carles Gages y posteriormente ha trabajado como jefe de cocina para diferentes centros del Gobierno vasco.

En la actualidad sigue en el Lvdvs, que era el lugar donde se formaban y vivían los gladiadores, cuyos combates eran uno de los ocios favoritos del pueblo. Por eso la palabra latina 'ludus' derivó en todo lo relacionado con diversión y entretenimiento, como lúdico o ludoteca, y por eso eligieron este nombre.

En la zona del bar ofrecen menús del día, una cocina casera y hecha como en casa, con productos de mercado y de temporada, en un ambiente cálido y familiar. En el menú del fin de semana, ya en el comedor, encontramos platos más elaborados como la crepe de vieiras y gambas, bacalao a la vizcaína, delicias de pato al Oporto, ensalada de ventresca con escalivada y vinagreta de gildas, lenguado tigre asado al txakoli, el revuelto de perretxikos… pero también otros más sencillos como un surtido de ibéricos, una ensalada de ahumados con espárragos o entrecot a la plancha.

La carta de picoteo es muy variada: hamburguesas especiales, raciones, bocadillos… y los afamados nachos Vulcano, picantitos. También destaca la parrilla, donde hacen suculentos chuletones por encargo. Otra de sus grandes bazas son sus postres, que varían bastante y son caseros cien por cien.