Pizzas y crepes de mar en Arrigunaga

Ramón Sáez transmite su personalidad y contagia entusiasmo en un local «con magníficas vistas» al mar, situado junto a la playa algorteña de Arrigunaga. «Mi pasión por la pizza viene desde pequeño», confiesa. Y su objetivo es que, igual que a él, encante a todos los comensales. La pizza Layback lleva lechuga, tomate, cebolla roja, nueces, ventresca, pimiento rojo, mango y aguacate. Original y deliciosa, con una masa en su punto, una sobresaliente base hecha a mano, y productos de primera calidad.

El entorno ayuda a disfrutarla desde la terraza «con unas vistas maravillosas» al parque y a la playa de Arrigunaga. Entre sus muchos clientes –los hay de todas las edades– no faltan el surfer que acude a coger olas y el skater que disfruta en la pista de La Cantera, cuna de buenos deportistas.

En el Layback hay de todo. Aparte de la buena música y el buen ambiente, sirven crepes dulces y salados. Son inolvidables. El Layback grapao es uno de ellos. Un crepe de mar, de contrastes que enamoran al paladar, con su salmón ahumado, aguacate, mango, philadelphia y soja. Si la variedad está garantizada en pizzas y crepes, lo mismo sucede con los gofres. El Oreo lleva la famosa galleta, chocolate blanco y Nutella. Pero se pueden escoger otros ingredientes como compañeros, como Lacasitos, Kinder, Nocilla...

Otro de los platos que se ofrecen en este local y que hay que probar es el pulpo Layback al horno, servido con patata y alioli. Lleva un punto especial que le da una especia argentina «que tiene un sabor muy particular, muy bueno. A mí me encanta», explica Sáez.

Y también encandilan las bolas de falafel y verduritas con salsa yogur, mientras que las 'maxicroketas' deberían llevar firma de autor. Aparte del buen tamaño desvelado por su nombre, llevan queso de Cabrales con seta shiitake o con carrillera.

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