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ATLAS ESPAÑA
Miércoles, 13 de marzo 2019, 21:56
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Cunde la desesperación por encontrar vida bajo sus pies. Este colegio de Nigeria se ha venido abajo con niños en las clases y este es el dramático resultado: destrucción y más de un centenar de sepultados. El reloj juega en contra. Con escasa coordinación, esa marea de personas hacen lo que pueden para encontrar al mayor número de supervivientes. Además, una excavadora destierra para facilitar el paso a los rescatadores. Un intento de llegar lo antes posible a los que están enterrados. Hasta que, entre tanta desolación, se abre paso el milagro. Un niño asoma entre los cascotes. Se mueve y le colocan un casco para que no sufra más daños. Como él, más de la mitad de los atrapados han esquivado una muerte segura. Los han sacado con apenas unos rasguños y ya se recuperan en el hospital. Pero también son numerosas las víctimas que no han podido sobrevivir al desplome de un edificio que iba a ser demolido. Su estructura entrañaba riesgos, algo que ya es habitual en Nigeria. -Redacción-
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