Trump castiga por sorpresa con aranceles a Argentina y Brasil

Los aranceles perjudicarán principalmente a Brasil -que participa con un 13% en las importaciones siderúrgicas en Estados Unidos- y menos a Argentina -que no alcanza el 1% de representación en ese mismo mercado-. Funcionarios argentinos, no obstante, iniciaron en las últimas horas gestiones para conseguir una marcha atrás de Trump.

En Brasil, Bolsonaro confió en un presunto «canal abierto» de su presidencia con el líder estadounidense. En concreto, dijo tener «casi la certeza» de que podrá hablar directamente con Trump y alcanzar un entendimiento. El presidente brasileño no pudo sino reconocer que este golpe proporciona «munición» para sus opositores que cuestionan el alineamiento con Washington.

En Argentina el anuncio llega cuando faltan ocho días para el traspaso presidencial de Macri al presidente electo, Alberto Fernández, de la oposición peronista. Ya tuvo un contacto telefónico muy esperanzador con Trump en el que el estadounidense lo felicitó por su triunfo. «Su victoria ha sido comentada en todo el mundo», le dijo y se puso a su disposición. «No dude en llamarme», le aconsejó, y le aseguró que había «instruido» al Fondo Monetario Internacional (FMI) para encontrar una solución al endeudamiento que acumuló Argentina con ese organismo en la última etapa del Gobierno de Macri.

En ese contexto este lunes, el ministro argentino de Producción, Dante Sica, y el canciller, Jorge Faurie, anunciaron que se pondrían en comunicación con el secretario de Comercio estadounidense, Wilbur Ross para encontrar una salida al problema. Según el entorno del canciller, el propio equipo de Fernández avaló la gestión iniciada por el Ejecutivo saliente.