Nueva campaña para eliminar pintadas en Eibar

Las comunidades de vecinos deberán dirigirse al Ayuntamiento comunicando las fachadas en las que hay pintadas, autorizando que se pueda actuar sobre esa fachada de su propiedad. El plazo se abre mañana y concluirá el 22 de junio. Recibidas las solicitudes, se preparará desde el Departamento municipal de Servicios el planning de trabajo. Este trabajo se llevará a cabo con la contratación de cuatro personas.

Además de las solicitudes planteadas por los vecinos, se actuará en la limpieza de paredes y muros de titularidad municipal en los que haya pintadas. Se estima que para esta segunda campaña el volumen de trabajo será inferior, de forma que se limpiarán aquellas paredes que, por diversas razones quedaron fuera de la primera actuación y, además, se realizarán las labores de mantenimiento pertinentes.

La primera campaña se desarrolló hasta el pasado mes de abril y, a través de las misma, se logró la supresión de pintadas y grafitis en alrededor de sesenta calles de Eibar, atendiéndose al 100% de las solicitudes que habían planteado previamente los vecinos. Los trabajos se fueron realizando de forma escalonada por barrios. Para llevar a cabo esa iniciativa, el Ayuntamiento contrató a doce personas mediante contratos de cuatro meses de duración por persona. Seis de ellas llevaron a cabo la labor entre octubre y enero y las otras seis lo hicieron desde diciembre hasta abril. Esta actuación municipal de retirada y limpieza de pintadas se está complementando con otro tipo de medidas que pretenden evitar la aparición de dichas pintadas.

De hecho, el Ayuntamiento está haciendo un importante esfuerzo para identificar a los autores de las pintadas y hacer posible que afronten la responsabilidad de sus actos.

Fruto de esa labor, en lo que llevamos de año la Policía Municipal ha identificado a más de una docena de personas y abierto expediente sancionador a tres grafiteros, por existir pruebas que demuestran que son los autores de las pintadas. Lo que significa que estas personas tendrán que abonar la cuantía de la multa correspondiente -entre 120 y 400 euros-, así como el coste derivado de la retirada de la pintada. Además, y ante la persistencia de la aparición de grafitis, se van a adoptar desde el Ayuntamiento actuaciones más drásticas contra los autores, ya que todo hace indicar que las sanciones de carácter económico que se han llevado a cabo hasta ahora son insuficientes. En todo caso, desde el Ayuntamiento se vuelve a hacer un llamamiento al civismo de la ciudadanía para conservar la estética de la ciudad y mantener limpias las fachadas en particular, y las calles en general.