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A diferencia de Bizkaia y Euskadi, que experimentaron una ligera disminución del desempleo en 2024, Ermua registró un aumento en sus cifras. Esta tendencia contrasta con los últimos años, cuando la villa presentaba tasas de paro inferiores a las provinciales y autonómicas. Esta propensión ha variado en 2024. La cifra de desempleados inscritos en Lanbide ha experimentado un incremento en el último año. Ermua ha alcanzado un total de 858 personas en las listas del diciembre pasado. Este dato representa un aumento de 99 parados en comparación con el mes de enero del mismo año.
En diciembre de 2024, la localidad contabilizaba un 11,4% de desempleo -8,5% hombres, 14,6% mujeres-, mientras que Bizkaia y Euskadi se situaban en el 10,6% y 9,8%, respectivamente. Estos datos revelan un incremento en la villa respecto a diciembre de 2023 -año en el que estaba en torno al 10%-, mientras que en Bizkaia y Euskadi se produjo una disminución desde el 10,8% y 10,01%, cada uno.
Para tener una perspectiva de la evolución que se ha registrado en los últimos años, en 2020, el municipio vizcaíno presentaba un 11,4% de desempleo, frente al 13,1% de Bizkaia y el 12,1% de la CAPV.
El sector servicios fue el principal afectado por este crecimiento, concentrando casi el 50% de las nuevas incorporaciones al paro durante el año pasado -48 personas-. Con este aumento, el sector terciario agrupa ahora a 517 personas desempleadas en Ermua. La industria también registró un incremento de 27 parados a lo largo del pasado ejercicio.
En línea con la habitual tendencia local, las mujeres mayores de 45 años continúan siendo el colectivo más afectado por el paro en la localidad, con 303 personas. Les siguen las mujeres de 25 a 44 años -182 desempleadas- y los hombres mayores de 45 años -con 179 parados-.
Con estos datos, no se puede olvidar que la tasa de desempleo en Ermua ha fluctuado notablemente a lo largo de su historia. A principios de los 90, el municipio lideraba los índices de paro en su entorno, con una tasa que superaba el 19% en 1994 -3.500 personas paradas de sus 18.000 habitantes-. Sin embargo, a principios de los 2000, Ermua experimentó un giro radical. Gracias a una recuperación económica generalizada y a una mayor diversificación de su tejido productivo, la tasa de paro se redujo drásticamente, situándose en el primer trimestre de 2004 en un 4,79%, por debajo de la media de su entorno y prácticamente en el entonces denominado pleno empleo.
La crisis económica de 2008 volvió a impactar duramente en Ermua, aunque en menor medida que a principios de los 90. El sector de la construcción y, posteriormente, el de la automoción, fueron los más afectados. A pesar de este nuevo revés, la capacidad de recuperación de la villa y la puesta en marcha de medidas de reactivación económica ha permitido que el desempleo se haya mantenido en los últimos años por debajo de la media de la provincia y de Euskadi, hasta el año pasado, fecha en la que ha cambiado esta tendencia.
Según los datos publicados por Lanbide, Ongarai fue el barrio con un índice de desempleo mayor en Ermua en 2024. Un 7,7% de sus 1.575 habitantes se encontraba a finales del año pasado en las listas del Servicio Vasco de Empleo.
San Antonio también es uno de los espacios del municipio que supera el 7% de paro entre sus 1.534 residentes.
En este desafortunado ranking le siguen otros barrios del extrarradio de la localidad. En concreto, Santa Ana tiene un 6,8% de desempleo, San Lorenzo registra un 5,67% y el grupo Santiago aparece en las listas de Lanbide con un 5,5%.
El resto de zonas del municipio cuentan con cifras por debajo del 5% de población en el paro.
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