Ermua aprueba el Plan AROA para impulsar el uso del euskera en el municipio

El Ayuntamiento de Ermua ha aprobado en su último pleno el Plan AROA, una iniciativa estratégica que busca revitalizar el euskera y fomentar su uso en la villa. La aprobación contó con el voto favorable de todos los grupos políticos, a excepción del Partido Popular, que se abstuvo.

La concejala de Euskera del Ayuntamiento de Ermua, Harri Araiztegi, destacó la importancia del nuevo plan. «El Plan General del uso del euskera (1998) y el Plan de acción para la promoción del euskera (2012) han sido nuestras principales hojas de ruta, y AROA constituye el siguiente eslabón de la cadena», afirmó. La edil subrayó que AROA no es solo un plan, sino «un marco estratégico, una propuesta que pretende contribuir desde el euskera a la transformación social, con el fin de generar personas vascohablantes y dar nuevas oportunidades tanto a los sectores más fuertes como a los más vulnerables». El objetivo final, según la concejala, es «contribuir a la construcción de una sociedad más justa, equitativa e inclusiva en el seno de la diversidad lingüística del mundo, atrayendo a las personas no vascohablantes y respetando la elección lingüística de la ciudadanía».

El Plan AROA responde a los retos actuales de la sociedad ermuarra, buscando fortalecer una comunidad de vascohablantes activos en un contexto multilingüe. Para lograrlo, se definen cinco metas. Se trata de aumentar y facilitar las vías de aprendizaje del euskera, lograr un ecosistema extraescolar más euskaldun, aumentar el espacio del euskera en el entorno digital, incrementar las posibilidades de trabajar en euskera y aumentar el consumo de contenidos en euskera, tanto en el entorno digital como en cualquier otro contexto.

El documento aprobado se estructura en 7 ejes estratégicos: gobernanza, actitudes y motivaciones, conocimiento y competencia, uso, interacción, innovación e investigación, sistematización y comunicación. Además, detalla 14 retos distribuidos en 41 líneas de trabajo y 86 intervenciones o actuaciones. Estas propuestas se completaron con las aportaciones realizadas en una consulta abierta a la población, que fueron trabajadas posteriormente por la Comisión de Euskera.

Por su parte, EH Bildu de Ermua mostró su apoyo al Plan AROA, si bien quiso insistir en la necesidad de un impulso adicional al euskera desde otras perspectivas. «Nos parece interesante el informe, pero creemos que le hace falta otro impulso», señalaron desde la formación. Argumentaron que en Ermua «hay mucha gente que entiende el euskera pero luego no lo practica porque no sabe si el de enfrente lo sabe», por lo que ven fundamental fomentar su uso en comercios e instituciones. EH Bildu también expresó que la Comisión de Euskera «no es el motor adecuado para llevar a cabo esta función» y propusieron «alguna acción más del día a día», aprovechando el impulso del Euskaraldia para que este grupo participe en la Comisión de Euskera, buscando una transversalidad.

En respuesta a este planteamiento, Harri Araiztegi se mostró receptiva. «La semana pasada lo hablamos y estamos de acuerdo en que haya otros agentes o motores fuera de la Comisión de Euskera que planteen propuestas», afirmó la concejala, reiterando su interés en recibir contribuciones desde el inicio del proceso. «En la primera carta que envié a los colectivos que trabajan en la promoción del euskera quedaba claro que se trabajarían las propuestas que traigan los diferentes agentes, sean internos o externos a la Comisión», concluyó Araiztegi.

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