Segunda parte del drama de 'La isla de las tentaciones': un reencuentro inesperado a lágrima viva del ex del 'Conquis' y su novia

El lunes 'La isla de las tentaciones' dejó un momento para la historia de la televisión. La productora del reality logró dar forma a una escena de celos e infidelidades tan surrealista que pocas veces se ha visto un drama similar en la pequeña pantalla.

Él veía en una televisión imágenes en directo de lo que hacía su chica en la villa, donde permanece encerrada con una decena de solteros cuando, de repente, se fue a la habitación con uno de ellos. Allí comenzaron a tener relaciones, lo que desató la locura del novio, que inició una carrera por la playa de República Dominicana que queda para la historia de la televisión. Anoche, Telecinco emitió la segunda parte de este drama.

Las nuevas imágenes sorprenden igual o más que las del lunes. Montoya -el novio- llegó a la villa y tuvo que ser sujetado por varios de los solteros para evitar que accediese al interior del complejo. «¡Me has destrozado con el 'papafritas', que tiene una gambieta. Fóllatelo!», repetía constantemente y al borde de las lágrimas.

Rápidamente las cámaras se iban a su novia, Anita, que disfrutaba de un plácido encuentro sexual con uno de los solteros. No tardó en vestirse de nuevo e ir a ver qué ocurría fuera. Cuando vio a su novio desatado, esta también perdió los nervios. «¡Sinvergüenza!», le gritó en varias ocasiones.

Montoya, que se dio a conocer en 'El Conquis' de TVE, ya estaba tirado en la playa, desesperado, y con la camisa abierta pidiendo explicaciones al cielo. «¿Por qué?», gritaba el andaluz, como si esperase una respuesta divina. La contestación se la dio su propia novia. «Tú sabrás por qué...». Sandra Barneda, que perseguía a Montoya en su carrera por la playa, llegó a la villa de las chicas y tuvo que sentarse en la arena para coger un poco de aire y de paso tratar de tranquilizar al joven.

Lo que nadie se esperaba es que Anita iba a arrepentirse de su reacción para pedirle a su novio que le perdonase. «Vámonos juntos», le dijo mientras le daba un abrazo. Barneda, muy enfadada, trató de separar a la pareja. No se podían ver hasta el final del reality y se saltaron las normas por lo que la organización les impondrá un severo castigo. Finalmente, ambos se despidieron entre lágrimas y volvieron a sus respectivas villas con la sensación de haber cumplido con el show.

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