La actriz Mirela Balić consigue que David Broncano se haga un tatuaje de un escorpión en directo

Su nombre desvela sus orígenes. La actriz Mirela Balić nació en Madrid en 1998, pero tiene raíces serbias y croatas. «Vivo en Vallecas, eh», presumía ante David Broncano. Y aprovechó en 'La Revuelta' para reivindicar que «todo el mundo» pronuncia mal su nombre y apellido. Con alguna pequeña lección de serbio, explicó a Broncano el orden de los apellidos en esa cultura y cómo tiene «cosas de los dos países» que hacen gracia a su parte materna y paterna. «No se te da mal el idioma», elogiaba la invitada.

Conocida por su papel en series como 'Élite' o 'Cristo y Rey', la actriz acudió para promocionar la película 'Mala influencia', dirigida por Chloé Wallace. Cumplió con la tradición de regalar algo a Broncano. «En la 'peli' soy chunga, por eso te traigo una moto de juguete de chunga». El segundo regalo fue más conflictivo: un tatuaje de 'macarrilla' de un escorpión. «No puedes decir que no». Una afirmación que el humorista puso en duda a pesar de que la intérprete Clara Galle se tatuó la 'R' de su programa. Había truco. En su caso, era más fácil porque se trataba de una calcamonía especial que se utiliza en los equipos de maquillaje en los rodajes. Se puede quitar fácilmente con alcohol.

Balić disfrutó bailando una improvisación del beatbox de Grison. «Tengo varios familiares que son músicos». Y se enfrentó a las preguntas clásicas. «Estoy preparada». ¿Dinero en el banco? «Me gustaría tener más. El año que viene dar la entrada para un piso, pero nunca es un buen momento... Cada vez está más caro. Todo el patrimonio no te puedo decir, porque lo lleva mi suegra», se escudaba. «¿Y lleva las cuentas de la otra pregunta?», recogía Broncano. La actriz reconocía que con ella «hablo de todo». «Tengo una relación sana y satisfactoria. Follar, follo. Que he tenido otras relaciones que... ¿Y tú?». Ambos coincidieron en que es «divertido». «Ahora voy al gimnasio y lo notó mucho follando», contaba la invitada. «Se nota, eh. Si no, se te sube el gemelo. Un tirón en el cuello, la cadera...», respondía su anfitrión.

Antes apareció una invitada sorpresa. Chelo García-Cortés entró en 'La Revuelta' regalando piropos. «Qué guapo eres», le soltó a David Broncano. Hasta le olió. «Hueles bien». Y ahí se dio cuenta que sobre la mesa había un retrato de una vieja compañera de 'Sálvame'. «¡Mira! Ahí está Belén». «Estoy tan contenta de estar aquí... sois todos tan jóvenes».

No llevó regalo alguno para el presentador. Defendió que ella misma era el regalo del espacio de colaboración de Jorge Ponce. «Te traeré una foto de Bárbara y mía». Ella sí tuvo obsequio de Jorge Ponce. Y se colocó por encima del pantalón unas bragas al revés. Y se fue con otro más: una botella de limoncello.

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