¿Cuál es el menú ideal para sobrevivir al Azkena?
Los alimentos con mucho contenido de agua y ricos en grasas saludables se erigen como la mejor opción. Estas son las claves para alimentarse de manera consciente antes, durante y después del festival
Marilyn Manson exigía ositos de gominola en su camerino para endulzar los minutos previos a subirse al escenario, los miembros de Metallica pidieron pepinillos en ... vinagre antes de su actuación en el festival Rock in Rio y el 'rey' del rock and roll Elvis Presley acostumbraba a devorar sándwiches de bacon y mostaza y pollo frito durante sus giras. La alimentación previa a los conciertos es fundamental para las estrellas del rock, pero ¿y el público que acude a verles?
El Azkena empieza hoy y los festivaleros necesitan gasolina para que el cuerpo aguante durante tres jornadas trepidantes, aunque no siempre es fácil dar con un menú equilibrado y que aporte la energía suficiente. Eso no significa que no sea posible y la nutricionista Oihane Fuertes nos da las claves para alimentarse de manera consciente antes, durante y después del festival. Y no, en el menú azkenero ideal no hay espacio para hamburguesas grasientas, patatas fritas, porciones de pizza, ni cantidades ingentes de cerveza helada.
«Los días previos es importante consumir alimentos con mucho contenido en agua como tomate, pepino, lechuga, piña, naranja...», señala Fuertes. Para el Azkena ha preparado una dieta que empieza con el almuerzo previo a los conciertos. «Es importante ingerir alimentos ricos en grasas saludables como salmón y frutos secos porque ralentizan la absorción de alcohol», desliza.
Para la comida propone una ensalada de lechuga y quinoa con medio tomate, medio aguacate, una lata de atún, tres o cuatro lonchas de salmón ahumado y un puñado de nueces. De postre, un yogurt griego natural con dos cucharadas de avena. «Es una comida saciante, con nutrientes y que nos va a aportar energía además de ayudar a que luego el alcohol no nos pegue un pico», explica la nutricionista.
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En los 'food trucks'
Llega la hora de acceder a Mendizabala y ahora sí entramos en terreno peligroso. Entre concierto y concierto el hambre aprieta y es el momento de cenar. En el recinto está prohibido introducir comida del exterior y es evidente que la oferta de los 'food trucks' no es la más recetada en las consultas. Pero nuestra nutricionista ha seleccionado las mejores opciones dentro de la oferta disponible. «Una buena alternativa es un bocadillo de tortilla o un bocata de lomo o pollo con bacon y queso, que es algo que siempre vamos a poder encontrar. Es proteína y va a ser saciante, además de ayudarnos a que la bebida no suba tan rápido y a la recuperación del día siguiente». Por cierto, nada de pizzas ni de patatas fritas porque provocan una digestión más rápida y ayudan a la deshidratación además de ser perjudiciales para la salud en general. Otra cuestión importante es hidratarse (mucho, y con agua) durante los conciertos y después. En caso de ingerir alcohol es mejor no mezclarlo con refrescos azucarados.
Y si al llegar a casa después de darlo todo en Mendizabala sentimos un deseo irrefrenable de asaltar la nevera o la despensa, lo ideal es ignorar los ultraprocesados. Tampoco es recomendable un platazo de pasta con tomate o meterse un bocadillo de chorizo entre pecho y espalda. La mejor opción son «los frutos secos porque sacian y no vamos a comer tanta cantidad o, por ejemplo, unas barritas de avena caseras».
Para la mañana siguiente a una noche intensa de festival, Fuertes, que pasa consulta en el Hospital Quirónsalud Vitoria, recomienda desayunar fruta para rehidratarnos e incluir algo de proteína como lonchas de pavo mínimo 85% de carne o jamón serrano. El café es preferible evitarlo y sustituirlo por agua, infusiones o bebidas isotónicas «que hidratan y recuperan».
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