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PANKRA NIETO
25 años de Metro Bilbao: coronavirus

Un metro blindado contra la pandemia

COVID | ANIVERSARIO CON MASCARILLA ·

Viajar en suburbano también es seguro pese al Covid. El aire de los vagones se renueva por completo cada 4 minutos y se han extremado los controles y las desinfecciónes para minimizar el riesgo de contagio

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Martes, 10 de noviembre 2020, 14:10

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Tenía que ser un año de celebración y récords, pero el 25 aniversario de Metro Bilbao ha quedado marcado por la pandemia que ha puesto patas arribas al mundo. También al medio de transporte más utilizado de Euskadi, que ha redoblado esfuerzos para combatir la desconfianza de los usuarios a causa del Covid-19. Por eso, minimizar el riesgo de contagio ha sido el firme propósito del suburbano. Viajar en metro es seguro. Así lo han repetido una y otra vez los responsables de Metro Bilbao. Y este mensaje no se proclama a la ligera. Según varios estudios internacionales, no se conoce ningún brote en el mundo por viajar en metro –ni en otro transporte público–.

La falta de distancia en muchas ocasiones se compensa con el uso obligatorio de la mascarilla –una norma totalmente asumida y, de hecho, no es frecuente ver a pasajeros sin llevar tapadas la boca y la nariz– y con las medidas puestas en marcha para garantizar la seguridad de los usuarios que se montan en un convoy. Se han dibujado en el suelo señales para canalizar el flujo de los pasajeros y hay dispensadores de gel hidroalcohólico en todas las estaciones y andenes, además de que las desinfecciones y la limpieza son una constante. Por otro lado, los trayectos son más cortos que antes, de una media de entre 10 y 12 minutos, lo que favorece que los pasajeros entren o salgan de los vagones con mucha frecuencia. Y dentro se habla poco. Muchos viajeros se desplazan solos y no suele ser habitual que hablen con otros ciudadanos, reduciendo la exposición a las gotículas que se expulsan por la boca.

MANU CECILIO

Pero si hay un factor fundamental es la ventilación. Bien es sabido que una de las formas de transmisión más frecuentes del virus es por medio de los aerosoles, partículas que se quedan flotando en el aire. Metro Bilbao lo renueva cada cuatro minutos. En el suburbano se hace hincapié en extraer todo el aire y capturar el nuevo que procede del exterior por medio de unos filtros de última generación (de categoría G4 y adaptados a la normativa europea EN-779).

Una muestra más de las mejoras en el servicio que se han ido llevando a cabo en este su primer cuarto de siglo de vida y que ahora resultan cruciales para luchar contra el Covid. La pandemia lo ha desbaratado todo. El virus interrumpió la racha triunfal del metro, que en 2019 logró batir sus máximos registros y superar los 91,5 millones de validaciones. Sin embargo, con el confinamiento de primavera, el suburbano sufrió las mayores restricciones de su historia, por lo que no será posible quedarse ni siquiera cerca de esa exitosa cifra.

YVONNE ITURGAIZ

El patógeno obligó a reducir horarios y frecuencias, aunque la hora de inicio y finalización del servicio se han mantenido hasta estas últimas restricciones, cuando se ha decretado que el último servicio del transporte público sea a las 22.30 horas. En las primeras semanas del confinamiento de marzo, la oferta se redujo en torno a un 30% por las menores necesidades de desplazamiento de una ciudadanía encerrada en casa. Debido a las aglomeraciones en algunos servicios, se optó poco después por ampliar el número de trenes. Pero no fue hasta el 1 de junio cuando recuperó sus frecuencias y horarios de antes de la pandemia –salvo el servicio nocturno, que sigue suspendido por las restricciones al ocio– y con ello un considerable aumento del número de pasajeros.

Durante estos meses, el suburbano recuperaba la marcha, transportando hace tres semanas al 72% de sus viajeros habituales por las mismas fechas,. Pero en realidad con las nuevas restricciones el nivel de ocupación ha caído 10 puntos. Y los fines de semana, la caída es mayor, entre el 30 y el 40%. Antes de la pesadilla del Covid, en una jornada laboral, el número de movimientos diarios superaba los 300.000 y ahora está en torno a los 180.000.

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