Urkullu insta a las empresas a depender menos de la banca para financiarse

«En estos momentos de alta incertidumbre global, cobra especial importancia la capitalización de las empresas para abordar las transformaciones requeridas», señaló el lehendakari. Apuntó que la misión de la Administración «es favorecer una relación más fluida entre la industria de inversión local y el tejido empresarial» porque, insistió, es «importante reducir la dependencia del sistema bancario y ayudar a la profesionalización de la empresa familiar».

Apuntó, no obstante, la necesidad de contar con diversos mecanismos, dado que un 70% de las empresas tiene menos de 10 trabajadores. «Para la treintena de campeones ocultos que tenemos, pueden servir de plataforma los mercados orientados a empresas de reducida capitalización. Pero las empresas más pequeñas no cuentan con recursos ni medios para estos trámites», explicó. Añadió que este es un reto que preocupa a todas la regiones y que lo está abordando la Comisión Europea.

Recordó que el Ejecutivo autonómico ha impulsado el Instituto Vasco de Finanzas como agente catalizador del ecosistema financiero de la comunidad y que cuenta con el fondo Finkatuz, dotado con 260 millones y previsión de llegar a 300, con el que prevé entrar en ITP.

Por su lado, el presidente de la CNMV afirmó que España necesita que las empresas salgan a Bolsa porque «va en ello coger el tren de la transformación de la estructura productiva». Señaló que en toda Europa «se ha sobreexplotado» el recurso a la deuda bancaria como fórmula de financiación, con un peso del 30-35% en su balance frente al 10-12% de las empresas americanas.

Entre las ventajas de salir a Bolsa destacó el acceso a recursos propios cuando los ajenos se están encareciendo y la posibilidad de ampliar capital en cualquier momento. Resaltó también el «empaque» que da y cómo facilita la atracción de talento al poder vincular la remuneración a la cotización.

Al igual que Urkullu, recordó la iniciativa de la Comisión Europea para reducir los trámites y otra que prepara de carácter fiscal para incentivar el capital propio frente a los intereses de deuda.

En la jornada, organizada por la CNMV y Bolsas y Mercados Españoles (BME), los responsables de empresas vascas que han salido a Bolsa contaron su experiencia. El cofundador y expresidente de Solarpack, José María Galíndez, relató que ese paso, tomado en 2018, les permitió recabar 115 millones sin perder el control de la empresa. Por la parte de Dominion, su directora de Desarrollo Económico, Patricia Berjón, explicó que les había proporcionado una «financiación a largo plazo para su plan de crecimiento».

«Para nosotros fue una cuestión de supervivencia. Necesitábamos dinero para convertirnos en operador virtual», dijo José Poza, uno de los impulsores de Ibercom, que luego se fusionó con MásMóvil hasta crear un gigante que ha integrado Euskaltel. Alex Artetxe, presidente del grupo que lleva su apellido y que salió a Bolsa hace solo un año, recordó también la solución que supone para la empresa familiar. Por su parte, el presidente de la industria NBI Bearing Europa relató su positiva experiencia en BME Growth, el mercado orientado a pymes. Hasta Sidenor, que no cotiza, proclamó las virtudes de hacerlo. «Te permite acceder de forma más fácil a la financiación bancaria, mientras que nosotros tenemos que batirnos el cobre», afirmó su director general corporativo, Marco Pineda.