Bankia escoge una 'startup' vitoriana
ZM Algorithmic Systems está especializada en la aplicación de la inteligencia artificial a la inversión financiera, un nicho de negocio que cada vez interesa más a la banca tradicional
iratxe bernal
Martes, 14 de enero 2020
Con el negocio del crédito de capa caída los bancos tradicionales estudian un cambio de modelo en el que deberán ofrecer nuevos servicios y soluciones a sus clientes. Van un poco a rebufo de las 'fintech' y como lo saben no es raro que busquen alianzas con ellas o incluso fomenten su desarrollo cuando su propuesta les parece lo suficientemente prometedora. Es el caso de ZM Algorithmic Systems, una 'startup' situada en el Parque Tecnológico de Álava que acaba de ser seleccionada para participar en la quinta edición de Bankia Fintech by Innsomnia, el programa de aceleración con el que la entidad bancaria busca nuevos talentos.
Tras un proceso de selección, Bankia escoge las 'startups' con las innovaciones que más le interesa impulsar para, quizá, después incorporar en áreas de negocio tan diversas como la ciberseguridad y prevención del fraude, los medios de pago, las soluciones para empresas o las relaciones con los clientes. Una vez detectados los proyectos más prometedores o con más opciones para ser implantados próximamente, la entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri delega su maduración a la aceleradora valenciana Innsomnia para que desarrollen en ella productos o servicios ad hoc. Según sus propios datos, de las 47 'startups' con las que han trabajado desde que en 2016 lanzaran la primera convocatoria de este programa, 42 han realizado una prueba de concepto para el banco.
La firma alavesa ha sido incluida en el apartado dedicado a la aplicación de la inteligencia artificial al trading. Los analistas están a punto de dejar de emplear la tecnología para hacer cálculos, previsiones o comparativas confiando en su experiencia y olfato para dar el último paso y ejecutar una operación. Estamos entrando en un nuevo escenario en el que las decisiones de inversión se automatizarán. El 'big data' y el 'machine learning' ya hacen posible crear algoritmos capaces de entender cómo funciona un determinado mercado de valores. Recogen datos y crean patrones que, en un momento dado, incluso les permiten adelantarse a algunas variaciones y tomar las posiciones más ventajosas. Se prescinde así de sentimientos, algo que a veces cualquier inversor quisiera, pero también de muchos puestos de analistas, algo que las entidades siempre agradecen.
«La llegada de estas tecnologías a la banca tradicional es inevitable, porque su capacidad para analizar los movimientos del mercado a una velocidad imposible para los humanos. Esa rapidez permite gestionar el riesgo y las operaciones según se van produciendo en un mercado cada vez más complejo y que se mueve más deprisa precisamente por el uso que otros agentes hacen de la tecnología», asegura Eriz Zárate, fundador junto a Alain Mateo y Alain Porto de esta 'startup' que también participó en la última edición de B-Venture que anualmente organiza EL CORREO . En prueba de concepto van a proponer «la puesta a punto del agente de inteligencia artificial que hemos creado dentro de un instrumento de gestión del propio banco. Nuestro algoritmo es capaz de leer cuarenta variables que influyen en el mercado y decir casi al instante quién está participando y determinar, juzgando por los comportamientos registrados hasta ese momento, si van a intentar que el precio del valor suba, por ejemplo», explica.
«Para nosotros es una gran oportunidad porque tendremos la oportunidad de ayudar a la gestora de la entidad en la transición hacia una nueva forma de trabajar que les dará mejores resultados para sus clientes con menos costes. Los bancos españoles han dado muchos pasos en la digitalización de otras áreas, pero no la gestión de capital porque no saben cómo hacerlo», insiste. Tras esa prueba de concepto se inicia una etapa de trabajo en colaboración con especialistas de Bankia para, tras ver los progresos, en verano determinar si la entidad bancaria y la 'startup' llegan a algún acuerdo de colaboración posterior. «Desde luego nuestra intención es gustarles y que nos absorban, que seamos nosotros a quienes encomienden ese análisis cuantitativo cuando vean que es más provechoso y que los analistas que tienen hoy puede dedicarse a tareas como crear nuevos fondos», dice Zárate.