Cómo saber cuánto nos va a pagar el paro

Si antes de tramitar la solicitud oficial para obtener la prestación de desempleo queremos tener una estimación de lo que nos corresponde cobrar durante su duración podemos acudir al programa de autocálculo de la web del SEPE -que no tiene un resultado vinculante- o coger las nóminas y la calculadora para, con algunos nociones muy básicas, realizar nosotros mismos el cálculo.

Lo primero que hay que tener claro es que la de desempleo es una prestación contributiva, por lo que va a depender (dentro de unos límites) de lo que hayamos cotizado. Si tenemos un contrato indefinido, cada mes un 1,55% de nuestro salario bruto va destinado a la cotización que cubre esta contingencia. A ese porcentaje hay que sumar el equivalente al 5,5% de ese mismo salario bruto que paga la empresa que nos tiene contratados. En los contratos con una duración determinada, sean a tiempo completo o con jornada parcial, el trabajador para un 1,6 y el empresario un 6,7%.

¿Y cuánto hay que cotizar para tener derecho a paro? Como norma general, aunque hay excepciones para algunas actividades y tipos de contrato, necesitamos haber cotizado al menos 360 días de los seis años anteriores al cese de la actividad.

Sabiendo esto hay que conocer cuál es nuestra base reguladora para situaciones de desempleo, que es la media de lo cotizado por esta contingencia en los últimos 6 meses. Es decir que hay que sumar lo cotizado durante los últimos 180 días naturales tanto por nosotros como por la empresa en nuestro nombre y dividir el total entre 180. Ah, un matiz; las horas extra cotizan en la Seguridad Social, pero solo para las contingencias profesionales, así que no entran en el cálculo de la prestación por desempleo.

Por último, hay que calcular el 70% de ese importe, que será lo que cobremos durante los primeros 180 días de paro y, después, el 50%, que será lo que nos corresponderá entre el día 181 y el final de la prestación.

Una cosa más; hay que saber que hay unos máximos y mínimos legales que nuestra prestación no puede superar y que vienen definidos por el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM, que en 2022 será de 579,02 euros mensuales) y nuestra situación familiar. Así, las prestaciones mínimas son del 80% del IPREM más una sexta parte del mismo indicador si no se tiene hijos y del 107% con la misma mejora de la sexta parte si sí se tienen hijos. Las máximas son del 175% del IPREM más una sexta parte sin hijos; del 200% más la mejora de la sexta parte si se tiene un hijo; y del 225% más la sexta parte si se tiene dos o más hijos.

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