El dinero que nos ahorraremos en la declaración de la Renta si instalamos placas solares en casa
Algunas de las Haciendas forales aplican una bonificación del 15% de la inversión realizada con un límite de 3.000 euros
jorge murcia
Lunes, 23 de enero 2023, 01:22
Las energías renovables viven un momento de gran expansión, que en los últimos tiempos se ha hecho más necesaria que nunca para reducir la dependencia de los combustibles fósiles. Las instituciones públicas aceleran la construcción de nuevos parques eólicos y fotovoltaicos, pero también estimulan el autoconsumo de electricidad mediante paneles solares en viviendas individuales, edificios residenciales o empresas.
Instalar paneles solares ayuda a reducir las emisiones de gases contaminantes y la factura eléctrica. Los beneficios económicos llegan también a la declaración de la Renta: casi todas las administraciones públicas aplican deducciones en el IRPF -de manera directa o indirecta- a quien ponga paneles solares en su domicilio.
En Euskadi, Bizkaia es el único territorio histórico que hoy por hoy no ofrece este tipo de bonificación. En los otros dos -Álava y Gipuzkoa- se aplica una deducción del 15% de las inversiones realizadas, aplicable en cuatro años, y con un límite de 3.000 euros. Esta bonificación no sólo vale para la compra directa de paneles solares. También para la inversión en entidades cuyo objeto social principal sea el aprovechamiento de fuentes de energía eléctrica solar fotovoltaica. Es decir, en las cooperativas de energía que en los últimos tiempos vienen floreciendo en Euskadi. Este modelo, trata de plantas de generación de energía fotovoltaica, normalmente de pequeño tamaño, que suministran electricidad a quienes deseen participar del proyecto. Cada socio aporta un capital inicial. De esa cantidad, podrán deducirse el 15% en la base imponible del IRPF.
Eso sí, estas bonificaciones aplicadas en Álava y Gipuzkoa son única y exclusivamente para la vivienda habitual. No valen para las segundas residencias. Hay otro requisito, que es el de mantener «los elementos que hayan generado el derecho a deducción en el patrimonio del contribuyente» -los paneles solares o la participación en la cooperativa- durante un plazo «no inferior a cinco años».
Deducciones en el resto de España
En el resto de España -excepto Navarra, que también tiene su propio régimen fiscal-, las deducciones en el IRPF son indirectas. Es decir, no se aplican a la compra de paneles solares, sino a las obras de mejora de la eficiencia energética en viviendas y edificios residenciales.
La bonificación afecta a las cantidades invertidas en obras de rehabilitación que contribuyan a alcanzar determinadas mejoras de la eficiencia de la vivienda habitual y en los edificios residenciales. Un objetivo que se suele lograr con la instalación de placas fotovoltaicas.
Las deducciones van del 20% al 60% de la inversión realizada:
-Del 20% por obras de rehabilitación o mejora encaminadas a reducir la demanda de calefacción y refrigeración en un 7% en una vivienda habitual, ya sea como residencia propia o destinada al alquiler. La deducción es de un máximo de 5.000 euros por vivienda.
-Del 40% por actuaciones de rehabilitación que reduzcan un 30% el consumo de energía primaria no renovable -acreditado a través del certificado de eficiencia energética- o mejoren la calificación energética para alcanzar las letras 'A' o 'B'. Se puede deducir hasta un máximo de 7.500 euros por vivienda.
-Del 60% en el mismo supuesto de ahorro, pero para propietarios de viviendas ubicadas en edificios de uso predominante residencial. La deducción no podrá exceder los 15.000 euros.