Caixabank desvela cómo afectará la guerra en Ucrania a la economía en los próximos meses
Sus primeras estimaciones estiman una caída de un punto en el PIB previsto para este año, que era del 5,5%
iratxe bernal
Lunes, 28 de marzo 2022, 00:20
Al margen de la tragedia humana, la guerra en Ucrania va a tener también una elevada factura económica que, en nuestro caso y de momento, algunos expertos ya calculan que bajará el PIB previsto para este año en un punto. Es el caso de los especialistas el Caixabank Research (el servicio de estudios de la entidad financiera), quienes ya plantean ese escenario en un informe publicado ahora pero realizado con datos recogidos cuando aún no habían pasado dos semanas del inicio de la invasión.
Su análisis arranca recordando cuáles eran las expectativas antes del conflicto y dando por bueno que gracias a la elevada proporción de población vacunada, el despliegue de los fondos europeos, el consumo impulsado por el ahorro acumulado durante lo peor de la pandemia, la reactivación del turismo y la recuperación de los flujos comerciales internacionales podríamos esperar para este año un crecimiento del 5,5%.
Y aunque ya entonces el adelanto de las subidas de tipos de interés por parte de los bancos centrales, la persistencia de los cuellos de botella en las cadenas de suministro globales y el rápido aumento de la inflación «invitaban a la prudencia» y no dar por sentado ese 5,5%, ahora el conflicto sí que obliga a recortar esas previsiones aun a sabiendas de que sus consecuencias variarán mucho en función de su duración, el ámbito geográfico en el que se circunscriba y de las sanciones (y contrasanciones) que se impongan.
En primer lugar, el informe destaca el fuerte encarecimiento de la energía y para mostrar su impacto usa como referencia un aumento, en promedio anual, de 10 dólares el barril del precio del petróleo. Es decir, el precio medio de 2022 tendría que ser de 80,68 euros, una cifra muy alejada de los 119,98 en que cerró el viernes. En cuanto al gas la referecia empleada por Caixabank Research elevaría en 30 euros el megavatio hora, lo que situaría la media en 77 euros. «Este aumento conllevaría (su poniendo que la demanda de petróleo y de gas no fuera capaz de ajustarse a este encarecimiento de precios a corto plazo) un incremento del coste de las importaciones netas de cerca de 8.100 millones de euros, un 0,6% del PIB. En términos de crecimiento, estimamos que una subida del precio de la energía de tal magnitud restaría un 0,5%crecimiento anual del PIB de España».
En segundo punto de interés, pero consecuencia del primero, está en el alza de la inflación. «Los últimos meses hemos constatado cómo las presiones alcistas derivadas, sobre todo, del aumento del precio del petróleo, del gas y de la electricidad, se iban trasladando al resto de la cesta de bienes de consumo. En enero, más de un 60% de los bienes que forman parte del índice de precios de consumo ya presentaba un aumento de su precio superior al 2% interanual. Si los precios de la energía acaban manteniéndose alrededor de las elevadas cotas a las que apuntaban los mercados de futuros, la inflación podría situarse en torno al 7% en el promedio del año».
Las consecuencias inmediatas de ambos factores se traducirían en un menor crecimiento del consumo privado debido al aumento de la incertidumbre y a la caída del poder adquisitivo derivadas tanto de una mayor inflación como tener que destinar más al consumo energético