La Inspección de Trabajo regulariza el 37% de los contratos investigados
Información y comunicación así como las actividades profesionales y la construcción son los sectores con más fraude
La Inspección de Trabajo de Euskadi dio un importante salto en su labor con la denominada 'herramienta de lucha contra el fraude', un programa desarrollado ... por el Ministerio de Trabajo que utiliza tecnología 'big data' para detectar indicios de irregularidades en la contratación. La comenzó a utilizar en 2018 y su efectividad es tal que en las campañas alcanza un éxito del 37%, es decir, logra que las empresas regularicen más de un tercio de los contratos sobre los que se ha puesto la lupa. Este es al menos el resultado del primer plan de choque realizado en 2024 al que ha tenido acceso EL CORREO. El informe arroja una radiografía muy completa sobre los sectores y los colectivos donde se concentra el fraude.
El programa ponía el foco en dos ámbitos: el abuso en la temporalidad y el mal uso de los contratos fijos discontinuos, una modalidad que salió reforzada en la reforma laboral de 2021. La Inspección de Trabajo de Euskadi envió cartas a 1.843 empresas por indicios de fraude en la situación de 4.145 trabajadores y, ante el aviso, las compañías regularizaron 1.545 contratos, el 37% de los investigados.
En el primer apartado, el de la temporalidad, se programó la herramienta para detectar tanto contratos temporales que hubiesen excedido el máximo permitido como trabajadores que llevasen demasiado tiempo como eventuales. Se mandó avisó a 1.376 compañías por 3.385 contratos y, de ellos, se transformaron en indefinidos 1.211.
Según el informe realizado por la Inspección, el sector en el que se detectó mayor nivel de irregularidades fue el de información y comunicaciones puesto que las empresas transformaron el 58% de los contratos bajo sospecha; en concreto, 22 de un total de 38. En segundo lugar figuran las actividades profesionales, científicas y técnicas, con un 57%, y en tercera posición está la construcción, con el 55%.
En cuanto a la distribución geográfica, es llamativo que Gipuzkoa presenta un nivel de fraude mayor, ya que las empresas de ese territorio se vieron obligadas a modificar el 43% de los contratos investigados. En los casos de Álava y Bizkaia los porcentajes son más moderados, del 34% y el 31%, respectivamente.
Por género no hay apenas diferencias y por edades sí habría que destacar que hay un mayor índice de regularizaciones en el caso de los trabajadores de más de 45 años, lo cual resulta paradójico porque la precariedad se concentra en los jóvenes. Otro dato a resaltar es que entre los extranjeros el fraude es mayor, con una tasa de conversiones del 46% frente al 36% de los nacionales.
En el otro ámbito, el de los fijos discontinuos, se programó la herramienta para buscar el uso irregular de esta modalidad, que permite enviar al paro a los trabajadores en los periodos de inactividad. En concreto, se puso el foco en los casos en los que la vinculación del trabajador supera el 87% en los últimos doce meses. Se enviaron cartas a 467 empresas por 760 contratos y de ellos se modificaron 334, el 44%.
En este apartado los sectores en los que se destapó mayor fraude fueron el primario -agricultura, ganadería y pesca- , con la regularización del 100% de los contratos investigados, seguidos otra vez del ámbito de la información y comunicaciones, con una tasa del 81%.
Por territorios, Gipuzkoa vuelve a aparecer con un mayor índice de irregularidades, con un 47% de contratos transformados sobre los sospechosos. Le sigue de cerca Álava (46%) mientras Bizkaia queda con el 41%. En este caso los autóctonos presentan mayor nivel de fraude (45%) que los extranjeros (39%).
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