El sector financiero apuesta por una «suave recesión»
Enrique Sáez, consejero delegado de Fineco, cree que ya hay signos de que la inflación comienza a ceder
Una «suave recesión, de «corta duración», que pilla a Europa en un momento mucho mejor que en crisis anteriores, con menores tasas de desempleo y que permite alejar el fantasma de una contracción severa de la economía a corto y medio plazo. Esta es, en síntesis, la apuesta que tiene en estos momentos el sector financiero respecto a lo que puede suceder en la economía, en un momento cargado de incertidumbres y variables que en algunos casos parecen contradictorias. Esta es, en síntesis, la radiografía sobre las previsiones económicas que ha dibujado hoy el consejero delegado de Fineco, la división de banca privada de Kutxabank, Enrique Sáez, tomando como referencia el comportamiento de los inversores mundiales en varios mercados, tanto financieros como de materias primas.
Aunque la experiencia reciente ya ha demostrado que cualquier suceso puede trastocar todas las previsiones, Sáez ha indicado que «los mercados apuntan con claridad a una recesión técnica -dos trimestres consecutivos de crecimiento negativo-, pero aparentemente no será algo muy traumático». Pese a ello, ha advertido que habrá componentes de la economía que van a sufrir más que otros y en esta línea se ha referido a la financiación de las empresas que, ha advertido, «se va a complicar tras un largo periodo de inyecciones de liquidez que han llevado a que hubiese mucho dinero disponible y muy barato». Así, ha apuntado que al cotización de la deuda de empresas privadas ya ha comenzado a reflejar tipos elevados, lo que significa que van a incrementarse los problemas de las compañías para acceder a la financiación. Incluso, ha indicado que «ya se nota que los financiadores comienzan a seleccionar con mucho cuidado las operaciones», en una tendencia que indica que el dinero fácil se ha terminado.
Pese a ello, también se ha mostrado moderadamente optimista en torno a la evolución de los tipos de interés. Aunque la reserva Federal norteamericana y el Banco Central Europeo han anunciado subidas a corto plazo, el mercado ya apuesta por una relajación en la segunda mitad de 2023. Algo que, ha dicho, puede ser más claro en Estado unidos y verse de forma más moderada en Europa.
El consejero delegado de Fineco se ha detenido de forma muy detallada en analizar el fenómeno de la inflación, que es en estos momentos el epicentro de las principales preocupaciones de los gobiernos, las empresas y por supuesto de los ciudadanos. Y en este punto se ha mostrado especialmente optimista, ya que ha indicado que varios mercados de futuros e incluso de materias primas revelan el inicio de una relajación de los precios. Algo que ya es evidente en la cotización del petróleo -fruto de los tambores que anuncian una reducción de la demanda-, así como en algunos metales. Sáez ha apuntado que una parte de la inflación disparada que vivimos en estos momentos -al margen del efecto generado por el incremento de los costes energéticos- ha estado provocada por el acopio masivo, tanto de materias primas como de productos acabados, que han realizado muchas empresas. Un efecto, ha añadido, «de reacción a los problemas de suministro que han vivido durante meses y que ya se están corrigiendo», como revela el mercado de fletes marítimos o incluso de chips. También ha achacado parte de la espiral inflacionista al 'boom' del consumo generado por la salida de la pandemia que, según todos los indicios, ha comenzado a ceder y aún lo hará más a la vuelta del verano.
Esas señales que ya anticipa el mercado de relajación de la inflación -las estimaciones apuntan a una media del 4%-, chocan sin embargo con otras estimaciones de movimientos que pueden generar incrementos de precios. Entre ellos ha destacado «la estimación de que habrá un otoño caliente» con muchas presiones para forzar un aumento de salarios.
