Las renovables crecen en Euskadi pero siguen muy por detrás de la media
El año pasado cubrieron el 16,2% de la demanda eléctrica, que registró la mayor caída de la península, un 7,8%, debido a la pandemia
Zigor Aldama
Bilbao
Viernes, 12 de marzo 2021, 17:31
Las energías renovables continúan ganando peso entre las fuentes de generación de electricidad. En 2020, su cuota en Euskadi creció 2,7 puntos porcentuales y alcanzó un máximo histórico del 16,2%. En el contexto del Estado, sin embargo, este porcentaje está aún muy alejado de la media española, que el año pasado se disparó 6,5 puntos hasta el 44%. De forma adicional, la pandemia provocó que el año pasado la demanda energética en el País Vasco registrase la mayor caída de la península: se redujo en un 7,8% -2,2 puntos más que la media estatal- hasta los 15.013 GWh, que representan un 6% del consumo eléctrico del país.
Según el avance del 'Informe del sistema eléctrico español 2020', publicado este viernes por Red Eléctrica de España con datos provisionales, la generación vasca de electricidad experimentó un descenso total del 25,2% y se quedó en 6.153 GWh debido principalmente a una reducción del 36,8% en la producción a partir del ciclo combinado, la principal fuente de energía de Euskadi. A pesar de ello, los ciclos combinados fueron responsables de casi la mitad de la generación de energía eléctrica. El segundo lugar del mix vasco lo ocupó la cogeneración, con una aportación del 31,4%.
Entre la potencia instalada de energías renovables destacan la hidráulica -5,9%- y la eólica -5,3%-, seguidas a una distancia considerable por otras más minoritarias como la solar fotovoltaica -1,7%-, que fue la que más creció en el conjunto de España -65%-. A nivel nacional, las características geográficas y climáticas hacen que el mix sea diferente: la energía eólica es la más relevante, genera ya el 21,9% de toda la electricidad del país, y va seguida de la solar, que supone el 6,1%.
Hacia un nuevo sistema energético
Con estos datos, la presidenta de Red Eléctrica, Beatriz Corredor, ha subrayado que «el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima marca unos objetivos ambiciosos, pero también realistas y alcanzables, para mitigar el cambio climático transitando hacia un nuevo sistema en el que las energías renovables son la pieza fundamental», y ha añadido que «el sector eléctrico juega un papel clave por su potencial descarbonizador» en la transición energética. A ese respecto, el informe destaca que en 2020 se cerraron instalaciones de carbón con capacidad para generar 3.950 MW, un hecho que, por primera vez, deja al mineral como fuente de solo el 2% de la electricidad nacional y otorga a las renovables un 53,8% del total de la potencia instalada de España. Si se suma la nuclear, en 2020 el 69% de la demanda eléctrica peninsular se cubrió con tecnologías que no emiten CO2, lo que permitió reducirlas en un 27,9%.
No obstante, los datos dejan en evidencia que Euskadi tiene aún un largo trecho por recorrer en materia de energías renovables para alcanzar la media nacional. No en vano, el año pasado solo generó 326 GWh de energía eólica, muy lejos de los 2.378 de Navarra y a años luz de los 12.573 GWh del líder en esta categoría, Castilla y León. Incluso en energía hidráulica -351 GWh- está por detrás de comunidades como Asturias -1.490- o Aragón -3.466-. Y las estadísticas demuestran que el sol, aunque no brille tanto como en otras comunidades autónomas, es la gran asignatura pendiente: en 2020 el astro solo generó en Euskadi 61 GWh, casi una quinta parte que en Navarra.