El Puerto de Bilbao queda al margen de la recuperación al caer su tráfico un 12%

El Puerto de Bilbao no logra engancharse a la recuperación que presenta el resto del sistema nacional portuario. Su tráfico cayó un 11,8% en abril respecto al mismo mes de 2020, marcado por el confinamiento, mientras que en el conjunto de los Puertos del Estado se incrementó un 8,7%. El análisis de los cuatro primeros meses muestra la misma brecha: descenso del 11,5% en la dársena vizcaína frente a un recorte mínimo del 0,2% a escala nacional. La explicación está en el impacto negativo de Petronor, por el desplome en el consumo de combustibles, pero también en el menor dinamismo en los contenedores y en el resto de la mercancía general.

La planta de Repsol es un factor determinante porque los graneles líquidos suponen la mitad del tráfico del Puerto de Bilbao y en abril descendieron un 25%. En el conjunto de los cuatro meses esta partida clave acumula una caída del 16,7%, hasta las 5,7 toneladas. Y es en gran medida la causa de que el total haya registrado un retroceso del 11,5%, hasta los 10 millones de toneladas. Otros puertos con refinerías como Cartagena o Huelva sufren el mismo problema, aunque el primero ha resistido mejor y, de hecho, ha superado a Bilbao en el ránking de tráfico al arrebatarle la cuarta posición y colocarse por detrás de Algeciras, Valencia y Barcelona.

Pero el peor comportamiento de la terminal vizcaína en mercancía general (incluye los contenedores y otros productos como el siderúrgico) resulta mucho más llamativo. Registró una tímida subida en abril del 2,7%, frente a una potente recuperación del 20% en la suma del sistema. En el balance de los cuatro meses cae un 11%, mientras que la media nacional crece un 6,8%.

Dentro de la mercancía general, lo más importante son los contenedores, área en la que Bilbao se ha quedado muy rezagada. En abril su tráfico subió un 5,6%, menos de la mitad que el conjunto nacional, pero es que en los cuatro meses cae un 11%, cuando el resto aumenta casi el 7%. Hay varias explicaciones a este peor comportamiento. Una de ellas tiene que ver con la congestión que registra a nivel mundial el movimiento de contenedores, que se agravó con el bloqueo del Canal de Suez a finales de marzo por el incidente del 'Ever Given'.

Bilbao se ha visto especialmente afectada porque depende de puertos del Norte de Europa, como Rotterdam, donde llegan los grandes portacontenedores que luego reparten su mercancía en barcos más pequeños, los 'feeders'. «En Rotterdam ha habido cuello de botella y se da prioridad a los grandes barcos, lo que prolonga las esperas de los pequeños», señala Arturo Miguelez, responsable de Green Ibérica, el brazo español de la naviera Evergreen, que alquiló el 'Ever Given'.

Este directivo señala, asimismo, que las navieras están dando prioridad a los tráficos con China, que son los más rentables. No obstante, también considera que Bilbao se está resintiendo de la larga huelga de la estiba a finales del año pasado. «Se perdieron tráficos que no han vuelto. No hay más que ver cómo va Barcelona, con un incremento del 29% en los contenedores», señala. Por parte de la Autoridad Portuaria se limitan a responder que «influye la escasez de contenedores vacíos en Bilbao a favor de otros puertos como Barcelona, Valencia y Algeciras».

La institución destaca el buen comportamiento de los graneles sólidos (soja o cemento) como señal de la recuperación del comercio exterior. Su tráfico creció un 26% en abril, mientras que el saldo de los cuatro meses arroja un incremento del 13%.