Los inversores huyen de la Bolsa española tras el acuerdo del PSOE con Podemos
Las caídas de las acciones de los bancos rozan el pánico y el sector pierde 6.000 millones de euros de valor en tan sólo dos días
El mercado financiero español ha vivido este miércoles su segundo día de pérdidas importantes, bajo la influencia del acuerdo alcanzado por PSOE y Unidas Podemos para formar un Gobierno de coalición. Los inversores han decidido, aparentemente de forma masiva, abandonar sus inversiones en las grandes empresas nacionales, ante el temor a una desaceleración de la economía más acusada de lo previsto. También ante un escenario de medidas concretas del nuevo gabinete que resulten dañinas para la cuenta de resultados de algunos sectores. El más castigado por esa venta masiva de acciones en sin lugar a dudas el sector de banca. El compromiso de Pedro Sánchez de que Nadia Calviño ocupará la vicepresidencia económica –un gesto que se interpreta como una clara apuesta por el rigor en materia económica– no ha sido suficiente para tranquilizar a los ahorradores, que han decidido apostar por mantener posiciones de liquidez y abandonar de forma progresiva los activos en riesgo.
El IBEX –el principal índice de referencia del mercado bursátil español– anotó al cierre de la sesión de este miércoles un retroceso del 1,21%, que se acumula a la baja del 0,86% registrada en la sesión del martes. El cierre –9.194,50 puntos–, pese a todo, fue moderado gracias a una corrección al alza durante la tarde, ya que a lo largo de la mañana el mercado bursátil español registró perdidas cercanas al 1,8% en algunos momentos.
En el caso de los valores del sector financiero, sin embargo, el temor a nuevos impuestos sobre la banca ha situado su cotización al mismo borde del pánico. Así, Bankinter ha retrocedido un 3,74%; Santander el 3,49%; Sabadell el 2,99% y BBVA el 3,25% y CaixaBank el 2,59%. Unicaja (-6,78%) y Bankia, que ha experimentado en los dos últimos días una pérdida de valor del 8% –casi 500 millones de euros de capitalización menos–, son significativos por el temor a que sobre estas entidades se despliegue una mayor influencia política en su gestión. En su conjunto, el sector bancario español ha perdido 6.000 millones de euros de valor en Bolsa desde que se anunció el pacto de PSOE y Podemos.
Banca y política
Las acciones del banco que preside José Ignacio Goirigolzarri, que tiene al Estado como accionista de control –el capital público posee el 61,34% de sus acciones– sufre los temores a un cambio drástico de rumbo, como ha reclamado en numerosas ocasiones Pablo Iglesias. La posibilidad de que Bankia pueda convertirse de nuevo en un banco gestionado por políticos, al modo y manera de las antiguas cajas de ahorros, despierta sensaciones de pánico en los inversores.
En contra de la creencia habitual de que los descensos bruscos de la Bolsa sólo afectan a los ciudadanos más acaudalados, lo cierto es que sus fluctuaciones tienen un impacto generalizado en amplias capas de la población, incluso en las más modestas. Buena parte de los activos financieros en los que los ahorradores más modestos tienen depositados sus ahorros –como es el caso de los planes de pensiones– invierten sus recursos en Bolsa.
Por otra parte, la prima de riesgo, el diferencial que debe pagar España por su deuda pública en comparación con el bono de referencia de Alemania, también mantiene una tendencia alcista y ha escalado algo más de cuatro puntos para situar su tasa –74,80 puntos– en la cota más elevada del último mes.
