«Hay una lucha importante entre las empresas por conseguir talento»
Las dificultades para dar con los perfiles más demandados, sumado al reto demográfico vasco, marcarán la realidad del trabajo en próximos años
Sergio Llamas
Sábado, 22 de abril 2023, 00:25
Tres de cada cuatro empresas reconocen tener problemas para dar con los perfiles profesionales que demandan en Euskadi, donde, además, los datos demográficos juegan en contra y hacen temer una falta de población en edad activa para los próximos años. El ciclo 'Mundo futuro. Claves para conseguirlo' que organiza EL CORREO con el patrocinio de Iberdrola, Gobierno vasco, Ayuntamiento de Bilbao y BBK reflexionó esta semana sobre el reto del empleo. Lo hizo con la participación de profesionales como la responsable de Atracción y Selección de Talento de Zona Norte y Oeste de Iberdrola, Leire Hormigo, quien advirtió de la pelea existente para hacerse con trabajadores cualificados. «Hay una lucha importante entre las empresas por conseguir talento. Ahora mismo estamos pegándonos sobre todo por el tecnológico», detalló.
El encuentro, dirigido por la periodista de EL CORREO Ana Barandiaran, presentado por Marta Madruga y con la participación de la directora de Obra Social de BBK, Nora Sarasola, remarcó la necesidad de sumar perfiles STEM (acrónimo de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas en inglés) y la necesidad del 'reskilling' o recapacitación de profesionales. A ello se dedican, por ejemplo, los campus de formación de Iberdrola, por los que pasan 13.000 personas al año, según detalló la propia Hormigo.
Pese a todo, los datos por el momento no invitan al optimismo. Aitor Arzuaga, director general de Alba Free Energy, filial de Petronor para impulsar la transición energética y la descarbonización, puso como ejemplo la desaparición en algunos centros de la carrera de ingeniería de telecomunicaciones por la falta de estudiantes, «pese a ser una actividad con cero paro». «Tenemos un reto muy importante como sociedad en cuanto a los mensajes que reciben los jóvenes entre los 14 y los 18 años y que les van a polarizar en el desarrollo de su vida estudiantil y profesional», reflexionó.
Las reflexiones
Selección de talento Iberdrola
Leire Hormigo
«Tenemos una apuesta por la recapacitación no solo de quienes ya trabajaban con nosotros, sino también de los nuevos empleados» | «Existe una desconexión actual entre el mundo académico y la empresa. Nos hablamos poco y, además, seguramente llegamos un poco tarde»
Responsable de talento BBK
Oihane Aldayturriaga
«Hay un reto con las homologaciones de los inmigrantes. Tienen dificultades y se ven abocados a ejercer otras profesiones diferentes» | «Hicimos una encuesta en la que participaron 13.000 jóvenes vascos y más del 80% veían su futuro aquí. Quieren vivir y trabajar en Euskadi»
Director general de Alba
Aitor Arzuaga
«Sobreespecificamos en demasía las vacantes y los perfiles que salimos a buscar. Siempre vamos a por el mirlo blanco. Hay que cambiar el chip» | «Necesitamos vendernos realmente bien, porque el talento cualificado puede trabajar en el país del mundo que quiera y somos algo anecdótico»
Emprendimiento de Cebek
Marta Martínez
«Vamos a perder 250.000 personas de población activa en los próximos años. Aunque volvieran todos los vascos por el mundo, no es suficiente» | «Somos una de las comunidades más prósperas, pero de las que menos ha crecido en población. Un 2% frente al 50% de Madrid»
Ésta no es la única profesión que sufre estos riesgos. Algo similar ocurre con la brecha generada entre los 3.700 ingenieros informáticos que se demandan y los 332 que se gradúan al año en Euskadi. Para resolver estas necesidades han surgido iniciativas como las señaladas durante el foro por la responsable de talento y emprendimiento en BBK, Oihane Aldayturriaga. Así, habló de los 'bootmcaps' digitales que desarrollan «con más de un 90% de empleabilidad, y que en cuatro meses preparan a las personas para profesiones como la ciberseguridad, la 'data science', la programación, el marketing y cualquier otra necesidad que las empresas nos comenten que necesitan», ejemplificó.
Aldayturriaga destacó la paradoja que se produce por la llamada 'curva de Beveridge', que permite convivir en una misma sociedad a millones de trabajadores en paro y a empresas que no encuentran los perfiles que necesitan. «Lo que has estudiado con veintitantos años ya no te va a servir para toda tu carrera profesional», subrayó, y recordó que esta situación es una «ola que no para» y ante la que «todos nos vamos a tener que adaptar».
«Tenemos un reto muy importante como sociedad respecto a los mensajes que reciben los jóvenes entre los 14 y los 18 años»
Reto en las pymes
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Para las pymes afrontar este reto de la recualificación tiene «una dificultad añadida» con respecto a las grandes empresas. Así lo señaló la responsable de Emprendimiento, Transformación y Personas de la Confederación Empresarial de Bizkaia Cebek, Marta Martínez, quien destacó que, pese a todo, las empresas de tamaño ajustado y las emergentes están desarrollando acciones en este sentido. «Al final la necesidad agudiza el ingenio», apuntó.
Martínez también puso la alerta sobre la pérdida en próximos años de una masa de 250.000 trabajadores en la población vasca actual. «Aunque volvieran todos los vascos que hay desperdigados por el mundo, y que son unos 100.000, no sería suficiente para cubrir estas bajas», puntualizó.
Ante esta situación, es necesario aprovechar la mano de obra inmigrante que recala en Euskadi, pese a que los datos alertan de que los perfiles que acuden al territorio tienen mayoritariamente una baja cualificación. Aldayturriaga recordó que en algunos casos el problema radica en sus dificultades para hacer valer sus titulaciones. «Hay un reto con las homologaciones de los inmigrantes. Tienen dificultades y se ven abocados a ejercer otras profesiones diferentes», afirmó.
En ocasiones, sin embargo, el problema está en el otro lado, y tiene que ver con la especificidad de los perfiles que persiguen las empresas: «el mirlo blanco», como lo denominó Arzuaga. «Sobreespecificamos en demasía las vacantes y los perfiles que salimos a buscar», advirtió.
La otra pata de esta realidad descansa en los propios centros educativos que, en algunos casos, pueden permanecer todavía alejados de las nuevas realidades laborales. Hormigo alertó de la «desconexión entre el mundo académico y la empresa». «Nos hablamos poco», lamentó.