El lehendakari asegura que el próximo Presupuesto será «el más alto de la historia»

Según ha explicado en una respuesta en el pleno de control al presidente del PP vasco, Javier de Andrés, «la situación económica de Euskadi es buena, hay unas previsiones de crecimiento en el entorno del 2% y creamos empleo». Un diagnóstico que «no olvida que tenemos retos», por eso «vamos a tener el mayor Presupuesto de la historia, para favorecer el desarrollo económico y de la industria».

Las acciones de apoyo a la industria, pero también a las energías renovables, para las que el Ejecutivo contempla una inversión de 160 millones, y «las crecientes demandas sociales» son algunas de las cuestiones que Pradales se fijó como hoja de ruta para los siguientes cuatro años. Una tarea en la que, además, se debe afrontar la principal asignatura: la sanidad -con más de 5.000 millones de gasto-, para la que el Gobierno trata de avanzar con un gran acuerdo político. Todo ello en un intento por poner fin a la imagen de desgaste de los servicios públicos que erosionó el final de la legislatura de Urkullu.

Es una larga lista de objetivos que comprometen al gasto público. De ahí que ya en el mes de julio y en la primera reunión del lehendakari con las tres diputaciones, Pradales advirtiera de su intención de presentar para 2025 el Presupuesto más ambicioso de la historia. Entonces las dificultades para lograrlo eran el efecto de los mutualistas en la recaudación -ha ascendido a 730 millones- y la evolución de la economía.

Según ha señalado el lehendakari en sede parlamentaria, el crecimiento económico con el que Euskadi prevé cerrar el año 1,9% será suficiente, aunque se quede un punto por detrás del cosechado por el resto de España. También Pradales apostó en su intervención del mes pasado en el Forum Nueva Economía por lograr una mayor capacidad de endeudamiento para las administraciones vascas. Una cuestión que se debe negociar en la Comisión Mixta de Concierto y que el Gobierno defenderá exhibiendo la realidad de la deuda pública vasca, la más baja de España con un 12% de su PIB.

Pradales también ha reconocido que hay dificultades, «como la conflictividad laboral, especialmente en el ámbito público», la retención del talento o el arraigo industrial. Para ello ha anunciado «un plan industrial nuevo, la movilización de un millón de metros cuadrados de suelo para las empresas, inversiones estratégicas para el arraigo con los fondos del Gobierno como Finkatuz y movilizando el cluster financiero BasqueFIK». Unas líneas de acción que, ha reconocido, contarán con respaldo económico en los Presupuestos.

El próximo martes 15 de octubre se reunirá el Consejo Vasco de Finanzas. El órgano que aúna a Gobierno u diputaciones y que, junto a Eudel, analizará la previsión de ingresos por impuestos y arrojará la cantidad disponible para elaborar los Presupuestos.