El Gobierno vasco elevará la inversión en I+D hasta el 3% del PIB para 2030

El homenaje también ha incluido al ecosistema conformado en el territorio para impulsarlas, como el programa Hazinnova. «Gracias a vuestro esfuerzo Euskadi se sitúa desde 2003 como país 'fuertemente innovador' en Europa, según el Regional Innovation Scoreboard. Pero somos exigentes, no nos conformamos y aspiramos a escalar un escalón más para situarnos entre los países 'más innovadores' de la Unión Europea», ha señalado en un discurso en el que Jauregi ha anunciado que el Gobierno vasco elevará la inversión en I+D hasta el 3% del PIB para 2030, apostando por la colaboración público-privada.

En este propósito el programa de innovación Hazinnova, gestionado por la Agencia Vasca de Desarrollo Empresarial, SPRI, y la Agencia Vasca de la Innovación, Innobaque, jugará un papel fundamental. La iniciativa comenzó en 2019 «y tras cinco ediciones hemos movilizado a más de 1.050 pequeñas y medianas empresas», ha detallado Jauregi. Como ha puesto en valor, las pymes han recibido el apoyo de «una red de agentes de innovación como instituciones públicas, cámaras de comercio, agencias de desarrollo comarcal o clústeres industriales».

En el encuentro también ha participado el director general de la SPRI ,Jon Ansoleaga, que ha destacado que el Plan de Ayudas a la Industria de 2025 se distribuye en tres pilares: «más industria», generando más actividad; «mejor industria», con mayor posición innovadora y capacidad tecnológica; «y con menos emisiones», a través de la electrificación y los consumos térmicos mediante energías renovables, la descarbonización industrial o las energías marinas, entre otros. El objetivo es mantener su dinamismo y atender en especial a las pymes, para lo que la SPRI moviliza 500 millones de euros en diferentes programas de ayudas dirigidos a reforzar la tecnología, internacionalizar las empresas, digitalizar su actividad y ayudar a las pymes a asumir los retos de la descarbonización.

La directora general de Innobasque, Leire Bilbao, ha añadido que «la colaboración público-privada es el eje» del sistema vasco, en un momento en el que la colaboración y el compromiso «son más necesarios que nunca». Fruto de este tejido se ha conformado una red de agentes de apoyo a la innovación con 90 entidades -desde empresas a centros tecnológicos, universidades e instituciones públicas- que buscan impulsar la innovación en las pymes de Euskadi facilitando el acceso al conocimiento, las tecnologías y los recursos necesarios para que las empresas puedan innovar de manera efectiva y sostenible.

El encuentro se ha cerrado con una mesa redonda para dar a conocer los ejemplos de tres empresas vascas que han recibido apoyo de Hazinnova, dinamizado por la directora del clúster del sector medioambiental ACLIMA, Olga Martín. La directora gerente de Industrias Ugatu, Amaia Ugalde, ha explicado como su pyme trasladó la venta de tornillería especializada al mundo de internet -donde ya realiza el 80% de las operaciones-, «ante la amenaza de importanción intensiva de producto asiático», y comercializa on line más de 7.000 referencias, así como productos realizados bajo plano. Ya han participado en varios programas de Hazinnova, generando un ecosistema que les ha ayudado a superar el reto de la pandemia. «Casi no tuvimos que parar nuestra actividad», ha reconocido.

El CEO de Revenant Industrial & Ports Machinery, Alex López Aller, ha explicado su proyecto de remanufactura de carretillas elevadoras que incluye iniciativas de economía circular, al recuperar y validar como nuevas piezas de la maquinaria; la descarbonización, transformando los motores diésel en biogás; y una apuesta por el kilómetro cero, al garantizar su ubicación próxima al Puerto de Bilbao. «Hazinnova nos ha ayudado a crear un modelo de gobernanza y un organigrama de perfiles para las 30 personas que conforman ese ecosistema y ser así más eficientes», ha ejemplificado.

El último modelo detallado ha sido el de Nabla Wind Hub. Su jefe de operaciones, Eder Murga, ha explicado como una iniciativa que nació siendo «de pura ingeniería, en la que nos dedicábamos a vender documentos pdf» para analizar los diferentes desgastes de las instalaciones eólicas y buscar modelos con los que alargar su vida, ha dado el salto a la manufactura gracias a un acuerdo con una empresa de Dinamarca dedicada al desarrollo de anemómetros. «La entidad nos ha ayudado con la logística y nos ha acompañado para poder arrancar», ha resumido.