Gestamp se recupera en el tercer trimestre, pero acumula pérdidas de 92 millones hasta septiembre

El grupo de componentes de automoción Gestamp se recuperó en el tercer trimestre y logró unos beneficios en el periodo de 28 millones de euros. Estas ganancias le han permitido reducir las pérdidas acumuladas en lo que va de ejercicio hasta los 92 millones de euros. La compañía propiedad de los Riberas atribuye la mejora «al esfuerzo realizado para reducir costes, tanto laborales como operativos». Dentro de su plan de ajuste a finales de septiembre anunció el cierre de Matricería Deusto y la ingeniería de troqueles GTS, lo que supone el despido de sus 230 trabajadores.

La evolución del tercer trimestre supone un alivio respecto al mazazo recibido en el primer semestre, cuando llegó a acumular unas pérdidas de 120 millones de euros por el impacto de la pandemia en el mercado de automoción, agravado por el cierre de los concesionarios. Entre julio y septiembre, con la desescalada, Gestamp aumentó su facturación un 5,3% hasta los 2.038 millones de euros y el Ebitda un 10,8%, con lo que alcanzó los 244 millones. De esa forma logró el citado beneficio de 28 millones, idéntico al del mismo periodo de 2019.

Pese a esta mejora, la cifra de negocio de los nueve primeros meses muestra una caída del 19,5% hasta los 5.083 millones. El Ebitda desciende un 37% y queda en los 460 millones de euros, lo que deriva en las citadas pérdidas de 92 millones, frente a unos beneficios de 128 en el mismo periodo del año anterior.

El grupo ya ha dejado claro que el cierre de Matricería Deusto y GTS es irrevocable. Precisamente hoy estaba convocada la cuarta reunión del periodo de consultas del ERE de extinción, pero no se ha celebrado. Los comités de empresas, dominados por LAB y ELA, han denunciado que se ha permitido entrar a todos los representantes de la parte social. Según han denunciado, la Ertzaintza tenía una lista con los que podían entran y no han permitido acceder a las personas que no aparecían en ella, «siendo éstos delegados o asesores de los sindicatos».

Por parte de la compañía aseguran que la dirección se mostró dispuesta a dejar entrar a personas que no estaban incluidas en la lista, pero se rechazó. Denuncian que el día anterior irrumpieron con violencia en las oficinas de la empresa en Derio y tuvieron que llamar a la Ertzaintza, razón por la que acudió a la reunión de hoy. Lamentan que se pierda la oportunidad de negociar porque el plazo de consultas cierra el día 7 de noviembre