Los jóvenes apenas cubrirán el 20% de las jubilaciones en Euskadi en la próxima década
La llegada de inmigrantes será esencial pero insuficiente para sustituir a los 260.000 trabajadores que se retirarán, según Adecco
El reto demográfico sin precedentes al que se enfrenta Euskadi en estos momentos es un desafío estructural en el que entran en juego factores como ... la baja natalidad, el envejecimiento poblacional y la fuga de talento cualificado, entre otros. Si se añaden todos estos ingredientes a una coctelera y se agita, el producto final es el siguiente: en la próxima década se jubilarán 260.600 trabajadores en Euskadi y tan solo se incorporarán 55.990 personas que a día de hoy tienen entre 6 y 15 años, según un estudio de la Fundación Adecco.
Publicidad
Una fotografía que no deja de ser preocupante y que plantea múltiples interrogantes sobre el sostenimiento del mercado laboral vasco. El documento señala que en Euskadi hay ahora 211.073 personas de entre 6 y 15 años que en la próxima década alcanzarán la edad legal para acceder a un empleo. Con una tasa de actividad del 27%, según registra la última Encuesta de Población Activa (EPA) del INE para menores de 25 años, se estima que solamente 56.990 de estos jóvenes pasarán a formar parte de la fuerza laboral durante la próxima década. Y es que a las malas previsiones hay que añadir que una gran parte de este relevo opte por alargar sus estudios y no se sume a las filas de los cotizantes hasta una edad más tardía.
Con todo, la conclusión es que por cada cuatro personas y media que se jubilarán en el País Vasco, solo una se incorporará al mercado laboral. Por territorios, Bizkaia es el que se enfrenta a un puzle de relevo generacional más comprometido y es que, en su caso, por cada entrada se retirarán 5,2 trabajadores veteranos. En Gipuzkoa, la situación es algo menos adversa, pero igualmente crítica, con 4 jubilaciones por cada alta, mientras que en Álava la ratio se sitúa en 3,8.
Este déficit estructural es difícil de paliar y necesita encontrar un aliado en la inmigración. Una solución solo parcial, según estiman desde Adecco, ya que «no bastará por sí sola». En el caso de Euskadi se espera, según proyecciones del INE, que entre 2026 y 2035 lleguen más de 128.000 personas extranjeras, aunque solamente el 80% estará en edad laboral y únicamente el 70% de estos buscará activamente un empleo -esto es, unas 72.000 personas-.
Publicidad
A esto hay que añadir el previsible desajuste entre las competencias disponibles y los perfiles demandados, lo que ocasionará que muchos puestos queden libres tras las jubilaciones. Y es que una gran parte del talento migrante aterriza con cualificaciones a las que en ocasiones cuesta sacar el potencial ya sea por barreras idiomáticas o por la necesidad de homologar los títulos.
Apostar por el talento sénior
Ante esta coyuntura en la que ni la inmigración ni la inclusión de los jóvenes formados en Euskadi son capaces de atajar el déficit de relevo generacional, «apostar por el talento sénior no es una opción, sino una necesidad», alerta Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco y director de Sostenibilidad.
Publicidad
En este sentido, recalca, «discriminar por edad es un completo contrasentido que supone excluir a más del 35% de la población activa y desperdiciar competencias clave como la experiencia, la madurez o el conocimiento acumulado». Es por ello que cree que promover su capacitación y romper con barreras como el edadismo, a las que este colectivo se enfrenta actualmente, «es un imperativo estratégico en un contexto de envejecimiento sin precedentes y una cuestión de justicia social».
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión